La politización de las becas estudiantiles no es nueva. Comenzó a anunciarse en mayo de 2018, cuando el Mppeuct informó que las mismas serían tramitadas a través del Carnet de la Patria, herramienta de control político creada por el régimen de facto. Para asignar las becas crearon el Sistema de Registro de Becas Sucre, que además de constituir un mecanismo paralelo en menoscabo de la autonomía universitaria, establecía un proceso de selección de apenas 50 mil estudiantes, cantidad que no representa ni el 2% de la matrícula universitaria que el propio Nicolás Maduro anunció en octubre de 2019 (2.829.520 estudiantes).
Insuficientes y discriminatorias
El 27 de mayo de este año César Trompiz, ministro del régimen para la Educación Universitaria, anunció que habían sido pagadas las becas universitarias a través del Carnet de la Patria. “Gracias al presidente @NicolasMaduro hoy, a través de la Plataforma Patria, hemos depositado la Beca Universitaria a todos los becarios y becarias de cada Institución de Educación Universitaria del país”, dijo Trompiz en un tuit publicado ese día. El anuncio no solo fue politizado sino falso; no todos los estudiantes becados recibieron dicho pago, que fue de apenas 320.000 bolívares, menos de dos dólares en su momento.
El Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad de Los Andes (ODH-ULA) condena y denuncia, una vez más, las reiteradas acciones del régimen de facto en contra de la autonomía universitaria en Venezuela. Así mismo, rechaza los mecanismos de control y manipulación políticos que pretenden anular los procesos de selección de becarios, los cuales responden y deben responder a méritos y necesidades económicas de los estudiantes.
Ante esta nueva arremetida, el ODH-ULA expresa su apoyo a la Dirección de Asuntos Estudiantiles de la Universidad de Los Andes (DAES-ULA) y a todos los estudiantes universitarios becados de esta y las demás universidades públicas del país.