El presidente de la encuestadora Datincorp, Jesús Seguías, considera que en la actualidad existe en Venezuela un nuevo mapa político y demográfico, que a su juicio la oposición ha “empantanado” debido a que la ruta electoral para propiciar un cambio de Gobierno se “dinamitó” al evitar la conciliación y querer decisiones absolutas.
Para Seguías, esa actitud solo ha generado una confrontación abierta con el Ejecutivo y que además la misma es desventajosa para quienes adversan al Gobierno, ya que mientras uno puede dominar sin obstáculos, la otra no tiene la capacidad interna para hacer respetar sus opiniones.
Es de la opinión que este sector, al contar solo con la comunidad internacional, se amparan en el poder que éste pueda tener. Pero “la comunidad internacional no llegará a los extremos que muchos sugieren desde hace tiempo: una intervención militar extranjera que expulse a Maduro y limpie el terreno para que la oposición gobierne. Este escenario está negado”.
Agregó que este tipo de acciones solo se llevan a cabo cuando el país que ejerce la intervención se siente amenazado, como fue el caso de EEUU con Afganistán tras el atentado a las Torres Gemelas en 2001, por lo que dijo que “ningún país librará una guerra asimétrica con un país selvático como Venezuela”. En ese sentido, ratificó que el único camino que ve posible es una negociación que se produciría vía sanciones, como medida de presión.
“Una vez descartada la intervención extranjera, así como una rebelión social y militar, tomando en consideración que el miedo tomó el control, lo que queda en Venezuela, son opciones negociadas, porque ni siquiera hay elecciones a la vista”, manifestó.
Reveló que en la actualidad se llevan una serie de reuniones, en donde la Unión Europea es el principal promotor de las mismas, para buscar una salida consensuada. Sin embargo, puntualizó que las mismas se dieron “después que el gobierno aceptó dar concesiones importantes, algunos siguen empeñados en el todo o nada”.-
Entre las cosas que habrían aceptado, está la renovación de los rectores del Consejo Nacional Electoral, que estaría conformado por dos integrantes afines al chavismo; tres ligados a la oposición y uno independente. Junto a esto, también el “refrescamiento” del Tribunal Supremo de Justicia; la liberación de los presos políticos, legalización de partidos y levantamiento de inhabilitaciones.
Se habló también de la eliminación de la Asamblea Constituyente, y un eventual referéndum para la aplicación de ciertas reformas constitucionales, que pudieran incluir la anulación de la reelección indefinida. En este punto -dice Seguías- dijo que este es un punto de interés a lo interno del chavismo, donde hay dirigentes con aspiraciones y donde el gobernante Nicolás Maduro no tiene el mismo liderazgo que tenía su predecesor, Hugo Chávez.
Según la nota de prensa enviada el 23 de diciembre, el presidente de Datincorp apuntó que esas concesiones que el gobierno estaría dispuesto a dar reflejan el resultado de una crisis, porque están “gobernando sobre la nada”.
También expresó que el Ejecutivo se encuentra muy debilitado “pero no hay quien lo empuje” debido a la falta de cohesión entre las tres principales líneas que se abrieron en la oposición: el ala radical que pide la salida de Maduro; la que negocia y la que está de acuerdo con ese sistema “pero es presa de las redes sociales”.
Seguías subrayó que uno de los más importantes desafíos que habría que contemplar para el 2019 es el refrescamiento de los partidos políticos ya existentes y la construcción de nuevas referencias políticas en el país, de ambos lados, porque al final, argumentó, la crisis en Venezuela se debe a un problema de liderazgo.