En Venezuela existe una hiperinflación que ha destruido el poder adquisitivo del venezolano común que solo adquiere un salario de 40 mil bolívares mensuales y esto ha provocado que la población se limite en la adquisición de bienes y servicios, incluyendo un simple calzado que ha llegado a costar hasta 200 mil bolívares como mínimo
Navih Elkheidi / ECS
Los zapatos son considerados por muchos uno de los complementos más importantes de la imagen y la vestimenta, es por esta razón que algunas personas buscan adquirir los de mejor calidad por cuestiones de presencia y moda. Para los venezolanos se ha convertido en un lujo adquirir cualquier tipo de calzado debido a los altos costos, los cuales superan los 200 mil bolívares incluyendo los de imitación.
Sin embargo, el valor de los zapatos es solo una referencia debido a que el mismo puede aumentar en cuestión de días o semanas por la difícil situación que atraviesa el país, con una inflación que va en aumento diariamente y porque es un negocio que se rige estrictamente por el dólar paralelo el cual compite actualmente con el precio del dólar oficial.
La hiperinflación ha afectado todos los sectores de la economía venezolana y la industria del calzado no escapa de ello. Varios dueños de zapaterías han expresado que la inestabilidad en el control de cambio ha dificultado la compra y venta de mercancía debido a que los precios de los zapatos se incrementan a medida que sube el valor del dólar ya que sus proveedores entregan la mercancía en consignación y la misma debe ser pagada al precio que esté la tasa de cambio.
Inflación en las zapaterías
En el mes de julio un par de zapatos costaba 279 mil bolívares para el mes de septiembre el mismo par de zapatos alcanzó los 479 mil lo que representa un 72% de incremento en los últimos 2 meses por lo que son requeridos 12 salarios mínimos para la compra de este par de zapatos.
Cabe resaltar que los zapatos cuyos precios son más económicos los cuales se ubican por un poco más de los 200 mil bolívares son aquellos de menor calidad por tanto la durabilidad de los mismos podría ser menor a la de aquellos de mayor costo generando de igual manera problemas a los compradores que se quejan al tener zapatos rotos al poco tiempo de haberlos comprado.
Varios comerciantes indicaron que hacen todo lo posible por ofrecer la mejor calidad en mercancía a sus compradores, pero que los zapatos de marca y de mejor calidad implican un costo muy elevado y que muchas personas no cuentan con los recursos para comprarlos. Del mismo modo mencionaron que los recientes cambios en la disminución del valor del dólar han permitido que se pueda reducir los precios de muchos zapatos y realizar ofertas especiales para aumentar el nivel de las ventas.
Venezolanos sin calzado
Miles de venezolanos, se enfrentan a la difícil situación de no tener como comprar ni siquiera un par de zapatos de baja calidad, cuyos precios oscilan hoy entre los 200 y 600 mil bolívares lo que supera por mucho al salario mínimo actual ubicado en 40 mil bolívares mensuales. Por lo que muchos se ven en la difícil decisión de abstenerse en comprar un par de zapatos para poder adquirir alimentos para sus familias. Bajo este escenario, cada vez son más los ciudadanos que acuden a sus lugares de trabajo o estudio con zapatos rotos y desgastados.
Varios ciudadanos expresaron su opinión en cuanto al costo de los zapatos y de cuales consideran que son las causas del incremento descontrolado de precios.
Precios por las nubes
José Salas: “Es una cuestión especulativa por parte de los comerciantes que se aprovechan de la situación para ganar más dinero, ya que si ellos expresan que los precios aumentan cada vez que sube el dólar entonces por qué no bajan los costos en los momentos en que baja el dólar. Esto demuestra un negocio manipulado por los comerciantes que no piensan en el bienestar ni las necesidades del pueblo”.
Rubén Blanco (comerciante de calzado artesanal): “Los precios de la materia prima están dolarizados y muchos proveedores guardan la materia prima para luego venderla al doble del precio y nunca son honestos en cuanto al valor de la mercancía. Hace un mes yo vendía un par de sandalias en 50 mil bolívares y actualmente tengo que venderlas en 200 mil para poder comprar más mercancía, por esta razón no critico a los dueños de las zapaterías que tienen que adquirir sus zapatos a precios dolarizados”.
Leonard Hernández: “Los precios son inaccesibles para lo que ganan un salario mínimo, aunque existen otras personas que quizás los puedan comprar con remesas que reciben del extranjero, pero son muy pocos los que podrán hacer esto. Y considero que la principal razón es el descontrol en las tasas de cambio monetario que suben cada día más provocando un impacto en los precios de todos los productos”.
Carolina Suárez: “Los zapatos son imposibles de comprar y ya ni siquiera vale ahorrar para poder comprarlos debido al aumento diario en los precios y esto es debido a las malas políticas del gobierno que no ha sabido controlar la inflación y ataca al comerciante para poder justificar su culpa”.
Precios justos
Cabe mencionar que funcionarios de Sundee han realizado inspecciones a varias zapaterías del municipio Valera verificando que los precios reflejados en las vitrinas sean los correctos y al momento en que los dueños presentan la facturación correspondiente los mismos se han ajustado a las indicaciones de los funcionarios en cuanto al control de precios justos.