Buenos Aires, 6 oct (EFE).- La selección argentina de fútbol, en la que la afición local tiene depositadas grandes expectativas para el Mundial de Qatar 2022, vuela muy alto desde antes del inicio de la cita balompédica más importante del planeta.
No se trata del óptimo rendimiento de sus jugadores ni de que su técnico, Lionel Scaloni, haya encontrado la mejor receta posible para derrotar a sus rivales: desde este viernes, literalmente, la selección argentina de fútbol estará por las nubes.
Una gigantografía de Lionel Messi, escoltado por Ángel di María y Rodrigo de Paul, surcando el cielo entre Buenos Aires y cualquier otra ciudad del mundo, marca la decoración del denominado «avión de la selección argentina de fútbol», presentado este jueves en el aeropuerto internacional de Ezeiza, en las afueras de la capital.
El hangar 5, el más grande de Latinoamérica, fue el escenario de una impactante presentación, cuyo punto culminante fue la caída del telón que cubría la aeronave tras unas luces celestes y blancas.
Messi con la mano sobre el escudo, De Paul besando la camiseta y Di María pateando con la zurda centraron la mirada de los cientos de invitados al evento, que sintieron como propio el lema «Un equipo, un país, un sueño», que forma parte de las instalaciones del Complejo Ezeiza, donde trabaja la selección y que también está impreso en el avión.
Aunque a esta altura se desconoce si la aeronave trasladará al combinado nacional, lo seguro es que el Airbus 330 de Aerolíneas Argentinas -compañía de bandera del país suramericano-, ploteado con la imagen de los tres futbolistas, otra del equipo abrazándose y otra de la camiseta, despegará este viernes rumbo a Madrid, iniciando varias rutas por todo el mundo.
La idea, surgida del acuerdo de patrocinio que la aerolínea tiene con la Asociación de Fútbol Argentino (AFA), incluye a otros patrocinadores, como la energética YPF y la cervecera Schneider, y el aval de Adidas como marca deportiva que viste la Albiceleste.
«Que llegue al aeropuerto de Catar en el marco de un Mundial de fútbol un avión que la característica principal es tener a Lionel Messi en la cola, con lo que implica, y el tamaño que tiene la cola de un 330 ya es una acción de comunicación por sí misma», explicó a Efe el director de Comunicación y Asuntos Institucionales de la aerolínea, Carlos Figueroa.
Este será uno de los aviones que traslade a los aficionados desde Buenos Aires, junto con otros dos decorados en su interior con motivos de la selección, para presenciar los tres encuentros que, hasta ahora, Argentina tiene programados en el Mundial: Arabia Saudí (22 de noviembre), México (26) y Polonia (30).
Según detalló Figueroa a Efe, «en términos de volumen, es una operación chica», ya que los seis vuelos programados «son los mismos que van a Madrid en una semana durante todo el año», pero resaltó el papel «simbólico» de la acción.
Los vuelos de Buenos Aires a Doha -con una breve escala técnica en Roma- tienen capacidad para 265 pasajeros, un precio de 2.900 dólares y saldrán dos días antes de cada partido de Argentina y regresarán dos días después.
Y, según la compañía, este producto ‘premium’ ya se encuentra vendido en un 70-75 %.
Con «mucha expectativa» como aficionado de la Albiceleste, Figueroa se atrevió a comentar que, si a la selección dirigida por Scaloni le va bien, dejará el ploteado «un año, mínimo».
«Si la gente queda contenta y pasa lo que pasó en Brasil, que hubo miles de personas recibiendo a la selección… Pensá que es una carrera con 200 equipos, incluyendo eliminatorias. Con estar, no sé, 2, 4, no quiero ser mufa ni resultadista, pero si nos va bien, la idea es mantenerlo mucho tiempo», especificó.
Por el momento, y hasta que empiece a rodar el balón, la selección argentina ya vuela en lo más alto.
.