José Gregorio Hernández: hombre de a pie con gran ideal humano

Su gran espíritu de entrega y servicio le abonó un camino seguro para poder llegar a los millones de corazones que hoy le veneran. a 154 años de su natalicio, sigue siendo artífice de la reserva moral y espiritual de la Venezuela.

 

Elvins Humberto González
Elvins2020@hotmail.com
Serie Especial: JGH “Bondadoso y Sabio” (II)

 

Aunque se asegura y certifica que el doctor José Gregorio Hernández es considerado como uno personaje más popular de Venezuela y mucho más allá de nuestras fronteras, en otras latitudes se le conoce y admira, pero hay que decir que JGH no fue un ser de otro mundo. El “Venerable” fue un mortal como cualquier otro hombre de esta tierra, un campesino con una sencillez y sentir de humanidad muy grande, cualidades que desde niño le fueron valiendo para ir edificando el futuro de un ser del cual hoy, todos clamamos por su santificación.

Pero JHG en pocas palabras fue una persona normal, un hombre de a pie, que con el tiempo fue adquiriendo conocimientos fundamentales que sumaron a su personalidad dotes especiales, pero no sobrenaturales. Eso sí, su formación y todo lo aprendido moldearon su ideal humano.

Claro está, que, la fama sumada en su existencia tiene que ver con sus aportes como médico y científico, a la forma como se dedicó a la atención de quienes requerían de su ayuda, todo enmarcado en su fe.

Sobre su popularidad que ha hecho que su imagen y nombre sea comparado solo con el Libertado Simón Bolívar, el Rector Emérito de la Universidad Valle del Momboy, Francisco González Cruz dice: “Es muy significativo que su imagen esté en todas partes: altares hogareños, clínicas, negocios, plazas, en el trasporte público, en las carteras de sus admiradores y especialmente en el corazón de muchísima gente. A José Gregorio Hernández se le ama por ser el médico de los pobres. Las imágenes populares más conocidas reflejan a un hombre sencillo, serio y de sereno rostro. De ejemplar vida como persona que combinaba muchas bondades: estudioso, caritativo, trabajador abnegado; médico, científico y profesor. José Gregorio Hernández no andaba por allí regañando a nadie, acusando a nadie y diciéndole cómo tenía que ser o hacer. Él era el ejemplo. En silencio y con modestia hacía lo que tenía que hacer.”

 

Por supuesto que siendo muy niño en aquel pueblo Isnotú lleno de necesidades, precariedades y devastado por la muerte en plena guerra, donde no había cómo atender a los enfermos, es cuando JHG echa a andar en su imaginación lo que en el futuro quería ser. Es así como se propone a no ser uno más, mucho menos un anónimo, se empeñó con trabajo, dedicación, disciplina, responsabilidad y mucho sacrificio a lograr sus objetivos, siempre con la intención de poder servir a todo aquel que necesitara ayuda. Todo eso fue cambiando la ruta de su vida, incluso sobreponerse a la gran crisis social derivada de la situación política del país cuando le tocó superar dos grandes escollos, dos férreas y crueles dictaduras, primero con Cipriano Castro y luego con Juan Vicente Gómez.

 

Maravilloso regalo de fe

 

Un gran estudioso de la obra y vida de José Gregorio Hernández es el Dr. Raúl Díaz Castañeda, autor de la novela, José Gregorio Hernández, “Un milagro histórico”, indica que: “JGH es muy popular, pero muy poco conocido. Él es la personalidad más importante de Venezuela sólo comparable con Bolívar, a diferencia que Bolívar fue para la guerra y JGH fue para la paz”, relató Raúl Díaz Castañeda.

 

El Siervo de Dios es un maravilloso regalo de fe, pureza y humanidad, digno de ser respetable. El Dr. Hernández fue nombre que salió del común, es ejemplo absoluto de sencillez y su norte fue la santidad, pero hay que aclarar que la santidad es el producto de un proceso para trascender, que amerita escudriñar debilidades y superarlas. Paero debemos conocerlo más, es ahí donde radica la importancia de inculcar en los niños y jóvenes el real significado de este gran hombre, de este humilde campesino querido y apreciado por todos.”

 

Reserva moral y espiritual

 

Su gran espíritu de entrega y servicio le abonó un camino seguro para poder llegar a los millones de corazones que hoy le veneran.
Según los biógrafos, su esencial autenticidad lo convirtió en un individuo que enmarcó su vida en principios y valores, el de ser buen hijo, que no anda pendiente de lo que pudieran decir de él, respetuoso, buen amigo y protector. Un hombre de una gran espiritualidad y misticismo, pero sin muchos ataviares.
Por todo lo que caracterizó a José Gregorio, a 154 años de su natalicio, sigue siendo artífice de la reserva moral y espiritual de la Venezuela.

 

Referencias y Consultas: Dr. Raúl Díaz Castañeda. Novela. “José Gregorio Hernández “Un milagro histórico”. Prof. Francisco González Cruz, José Gregorio Hernández, “Ciencia y Bondad”. José Gregorio Hernández (1864-1919) Leopoldo Briceño-Iragorry.

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