La Dirección Política de Avanzada Progresista deplora y rechaza las acusaciones del Presidente de la Junta Ad Hoc del Banco Central de Venezuela designado por la Asamblea Nacional, Ricardo Villasmil, quien en días pasados acusó sin fundamento alguno al economista Francisco Rodríguez de “traición a la patria.”
Villasmil y otros miembros del equipo del gobierno interino han llevado la opacidad en el manejo de las cuentas públicas a niveles pocas veces vistos en Venezuela. Se han resistido a la rendición de cuentas de cualquier tipo y frente a las solicitudes legítimas de recursos para atender las necesidades de los venezolanos, se han limitado a dar explicaciones poco transparentes que no resisten el más mínimo análisis lógico. Últimamente, se han dedicado a cuestionar a todos aquellos que presenten propuestas para ayudar a los venezolanos o que pidan explicaciones sobre el manejo de recursos con descalificaciones personales. Esta práctica perniciosa llegó a su máxima expresión con el cuestionamiento de Villasmil contra el economista Francisco Rodríguez, a quien acusó de “traición a la patria” por proponer que se usasen fondos en posesión del gobierno interino para ayudar a los migrantes venezolanos mediante un programa que, por ser implementado en el exterior, no requiere acuerdo con el régimen de Nicolás Maduro.
Es importante recordar que el gobierno interino ha recibido donaciones por el orden de cientos de millones de dólares, y tiene la titularidad de fondos por miles de millones de dólares en Estados Unidos. Esto lo ha demostrado el economista Rodríguez con evidencia verificable, tales como los estados financieros reportados ante los entes regulatorios estadounidenses por parte de los socios de PDVSA en empresas mixtas. Los datos de Rodríguez han sido presentados de manera pública y transparente. Villasmil y compañía han sido incapaces de ofrecer ni siquiera una respuesta medianamente coherente ante esta evidencia.
El nivel de opacidad en el manejo de los fondos públicos por Villasmil y su equipo ha llegado a tal nivel que lo poco que sabemos de sus transacciones los debemos a investigaciones periodísticas. Fue la Agencia de Noticias Bloomberq que descubrió el monto de una transferencia de fondos a una cuenta de la Reserva Federal, por $342 millones de dólares, la cual ocurrió solo días después de que el gobierno interino alegase que no tenía control sobre recursos en el exterior. Más recientemente, se conoció a través de un reportaje de Univisión que recursos provenientes de fondos incautados a la corrupción del régimen de Maduro fueron utilizados para contribuir con $601 millones de dólares usados para pagar el muro de Trump con México, incluyendo para pagar los centros donde hoy están detenidos inmigrantes venezolanos que intentaron entrar a Estados Unidos. Este desfalco ha sido denunciado por el Senador Estadounidense Bob Menéndez y el Director de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco. NI la Junta Ad Hoc del BCV encabezada por Villasmil ni la Oficina del Procurador Especial José Ignacio Hernández consideraron pertinente informar a la opinión pública venezolana sobre estos asuntos antes que fuesen reportados por los medios de comunicación internacionales.
Lamentablemente, la administración del gobierno interino se enfrenta a numerosas acusaciones de corrupción y despilfarro de recursos que no han sido investigadas con la seriedad e imparcialidad necesarias. La opacidad promovida por Villasmil, Hernández y otros miembros de esta administración, no ha hecho más que contribuir a crear espacios propicios a la corrupción en el peor estilo de la V República. Basta con leer el comunicado de la diputada Gaby Arellano quien acusa a la dirección de Voluntad Popular de manejos inescrupulosos y pide con su renuncia que vuelvan los valores morales y honestos a manejar el partido, para comprobar mediante sus fuentes íntimas el grado de corrupción que hoy anega el círculo cercado del presidente de la Asamblea Nacional.
Como carecen de argumentos sustantivos, sólo pueden caer en ataques personales. Ahora embisten en contra de uno de los economistas más destacados no sólo de Venezuela, sino de América Latina. Francisco Rodríguez cuenta con la distinción de ser el único venezolano hasta la fecha en haber obtenido un doctorado de economía en la Universidad de Harvard. Ha sido catedrático de algunas de las universidades más prestigiosas del mundo, tales como la Universidad de Maryland y la Universidad de Notre Dame. Es columnista de varios diarios internacionales tales como el New York Times y el Washington Post. Ha ejercido cargos ejecutivos en las principales organizaciones financieras multilaterales y en los bancos privados más importantes de los Estados Unidos. Cuenta con más de cincuenta artículos en revistas académicas y libros publicados por algunas de las editoriales más prestigiosas del mundo. Tiene además una incuestionable vocación de servicio público, y hoy se encuentra dedicado al diseño de iniciativas para atender la crisis humanitaria de Venezuela.
Frente a estas credenciales, personajes como Villasmil se escudan bajo la ofensa personal y el ataque vulgar y artero, utilizando frases como “traición a la patria” que capturan el peor estilo del Madurismo rastrero. Es vergonzoso para todos los venezolanos ver a quien pretende ser presidente de un Banco Central expresarse con lenguaje digno de Mario Silva y Lina Ron.
Nuestro gesto de solidaridad con el Dr. Francisco Rodríguez y nuestro repudio a la lamentable actuación de Ricardo Villasmil.
Henri Falcón
Presidente
Luis Romero
Secretario General.
Comunicado enviado por Prof. Iraly Guerrero