Por: Jorge Valero
Alfredo Suárez, “El Coco Julián”, ha bogado hacia los territorios de Dios, para continuar brindando con su bonhomía servicios al prójimo. Un alma buena consagrada al bien común que, desde muy joven, daba lo mejor de sí para que la comunidad bellavistera y valerana derrochara alegría.
En esos lugares sacrosantos “El Coco Julián” continuará liderando a sus congéneres, para que el apetitoso “Hallacazo” colme el vianda de los comensales.
Nuestro noble amigo fue un connotado deportista que, como flecha, recorría los 400 y 800 metros planos. En el ámbito cultural, también se destacó, desde los años 70, como forjador del grupo “El Taconazo.”
Me encuentro en los predios de la Universidad de Los Andes donde curso estudios de historia, hacia el año 1972, cuando me llega la noticia familiar de que los menores de edad Alfredo Suárez, Jairo Bracamonte y mi hermano Martín han sido detenidos por los cuerpos policiales, por cometer “crímenes de lesa patria”. Han estampado en las paredes de la ciudad de Valera un afiche en el que se pregunta “¿Dónde está Noel Rodríguez?”. A la sazón este joven revolucionario había sido “desparecido” y sus torturadores se habrían encargado de cegarle la vida.
Los adolescentes mencionados estuvieron varios días detenidos, pero “El Flaco” Pedro Javier Mendoza, Rafael Delgado, y Diego Suárez “El Pellejo” fueron mantenidos en prisión casi diez meses por pegar un afiche. Eran esos, otros tiempos.
Como queda dicho, “El Coco Julián” también incursionó, desde temprana edad, en políticas de justicia social. Por eso militó en partidos de izquierda, que levantaban las banderas de la liberación nacional y la emancipación humana.
En el barrio Bella Vista de Valera, que el próximo mes de diciembre celebrará sus 73 años de fundación, encabezaba a un grupo de sus habitantes que, en tiempos navideños, rendían tributo a su patrona La Virgen de Chiquinquirá, a través de gaitas, jornadas festivas y culinarias. Récord mundial la Hallaca que los bellavisteros liderados por “El Coco Julián” hacían, pues ella llegó a medir hasta 21 metros de largo, para beneplácito de todos.
Le esperan—con alborozo—en los ámbitos de las divinidades, los deportistas bellavisteros Bernardo Portillo, Mariano Quintero, “Cochocho” Bracamonte, Darío “Mandril” Rosales, Chema González, Isbel Hurtado, Cristóbal Rivas, “El Gordo” Neptalí Moreno y los artistas Livio Arias, Abad Guerrero y Arístides Mateus “Chimoito”, para compartir con él su periplo eterno.
Me sumo consternado al torrente de amigos y amigas que cosechamos su amistad y disfrutamos de su compañía. Paz eterna para un buen hombre. Mis más profundas condolencias a su esposa Belén, sus hijos Alfredo, Lenin y Gabriela y a todos sus familiares, amigas y amigos.