El expresidente peruano se disparó en la cabeza cuando la policía llegó a su casa para hacer cumplir una orden de arresto por 10 días de los fiscales que investigan el escándalo de corrupción de Odebrecht en Perú.
García, de 69 años y presidente de Perú durante dos periodos (1985-1990 y 2006-2011), falleció poco después en el hospital Casimiro Ulloa de Lima.
En la víspera, García había calificado de «especulación» el hecho de que se lo vinculase con presuntos sobornos recibidos por su exsecretario por parte de Odebrecht para la adjudicación de la construcción de la Línea 1 del Metro de Lima.
Pero la historia del expresidente peruano Alan García acabó este miércoles de un balazo que él mismo se disparó en la cabeza cuando la policía llegaba a detenerlo.
La fiscalía peruana investigaba al exmandatario por supuestamente recibir aportes de Odebrecht para su campaña presidencial de 2006 y por presuntamente recibir sobornos de esta constructora brasileña para adjudicarle una parte de la construcción de la carretera Interoceánica en 2009.
Tras su fallecimiento, quedan para la historia numerosos hechos que marcaron los dos mandatos en los que gobernó Perú, de 1985 a 1990 y de 2006 a 2011.
1. Hiperinflación
En su primer gobierno, Alan García suspendió los pagos de la deuda externa de Perú, creó un tipo de cambio fijo del dólar conocido como «dólar MUC» (mercado único del cambio) y empezó a emitir billetes de Intis (la moneda de ese entonces) sin un sustento correspondiente en la producción nacional.
Como resultado, los peruanos sufrieron una hiperinflación que alcanzó hasta el 7.000%.
Además, hubo una grave escasez de productos de primera necesidad y de medicamentos, por lo que la gente se veía obligada a madrugar y formar largas colas para conseguirlos.
2. Motines en los penales de El Frontón, Lurigancho y Santa Bárbara
En 1980, el grupo armado Sendero Luminoso (SL) empezó una guerra contra el estado peruano que dejó miles de muertos.
En 1986, más de 200 condenados y acusados de pertenecer a SL se amotinaron para exigir mejores condiciones carcelarias en el penal El Frontón, en el penal de Lurigancho y en Santa Bárbara.
El gobierno ordenó a las Fuerzas Armadas que recuperaran el control de las cárceles y el enfrentamiento dejó como resultado más de 200 presos, tres marinos y un policía muertos.
La Comisión de la Verdad y Reconciliación de Perú dice en su informe final de 2003 sobre estos hechos que «está en condiciones de afirmar que (…) (un grupo de) reclusos una vez rendidos y controlados fueron ejecutados extrajudicialmente por agentes del Estado».
En 2017 empezó un juicio contra 34 exmilitares peruanos acusados de más de 130 presuntas ejecuciones extrajudiciales. La acusación no incluyó a García.
3. Huída y autoexilio en Colombia
Cuando terminó su primer mandato, en 1990, García comenzó a ser investigado por enriquecimiento ilícito y fue suspendido de su cargo de senador vitalicio en 1992.
Ese mismo año, poco después de que Alberto Fujimori ejecutara un autogolpe, García pidió asilo político en la embajada de Colombia en Lima y un par de meses después abandonó Perú mediante un salvoconducto con destino a Bogotá.
Perú solicitó su extradición en varias ocasiones, pero Colombia la rechazó.
Tras casi nueve años de autoexilio, García regresó a Lima en 2001, cuando ya habían prescrito los supuestos delitos de corrupción de los que se le acusaba.
Ese año, volvió a postular a la presidencia de Perú, pero le ganó Alejandro Toledo.
En 2006, García inició su segundo mandato tras derrotar a Ollanta Humala.
4. Petroaudios
En 2008, estalló uno de los mayores casos de corrupción del segundo gobierno de García, conocido en los medios como «Petroaudios».
Medios peruanos difundieron grabaciones de conversaciones telefónicas entre Rómulo León (entonces miembro del APRA) y Alberto Químper, entonces director de Perú-petro, agencia estatal que promueve la explotación de hidrocarburos en Perú.
Ambos parecían negociar la adjudicación de lotes petroleros para la empresa noruega Discover Petroleum a cambio de dinero.
El escándalo derribó a todo el gabinete de ministros de García.
La justicia investigó por tráfico de influencias, cohecho y negociación incompatible a Alegría, Químper y otros implicados.
Pero en agosto de 2017, la Corte Suprema archivó definitivamente el caso porque los audios habían sido obtenidos de forma ilícita.
5. Baguazo
El 5 de junio de 2009, las comunidades nativas wampis y awajún, de la selva del noreste de Perú, llevaban 50 días bloqueando una carretera, como protesta contra dos decretos que afectaban el uso de los recursos naturales de la Amazonia y la propiedad de las tierras de los indígenas, a favor de la extracción de materias primas.
El gobierno envió policías para despejar la vía, ubicada en la ciudad de Bagua, pero la operación acabó en violencia.
Indígenas y policías se enfrentaron en el sector conocido como «La Curva del Diablo» y como resultado murieron 23 policías, 10 civiles y el agente Felipe Bazán desapareció.
Los polémicos decretos fueron derogados días después.
Entre 2014 y 2016 las autoridades peruanas juzgaron a 53 indígenas por las muertes del Baguazo pero fueron absueltos.
A fines de 2018, la Corte Suprema pidió anular la sentencia y abrir un nuevo juicio, pero hasta ahora este no ha empezado.
6. «Narcoindultos»
Entre 2006 y 2011, García otorgó indultos a 72 condenados por narcotráfico y conmutó la pena a 3.207 presos por este delito.
Además, 24 de los beneficiados con las conmutaciones de penas realizaron 80 aportes al APRA, según el informe de una comisión del Congreso que investigó los perdones.
Como resultado del caso, el presidente de la Comisión de Gracias Presidenciales, Miguel Facundo Chinguel, fue condenado a nueve años de prisión.
El informe de la comisión recomendó investigar a García, pero el Ministerio Público archivó la pesquisa en su contra en 2014.
Funcionarios de su gobierno defendieron las gracias diciendo que fueron parte de una política de deshacinamiento de los penales.