Con la finalidad de crear conciencia en todos los países sobre el delicado panorama de la alimentación y de los efectos del cambio climático y las nuevas energías emergentes, en el año 1979, se proclamó al 16 de octubre como el Día Mundial de la Alimentación.
La fecha coincide con el aniversario de la fundación de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), cuya función principal es ayudar a construir un mundo sin hambre.
Y este año, la celebración contiene dos aspectos primordiales para ser discutidos: El cambio climático y los biocombustibles, informó Alexander Mueller, Director General Adjunto de la FAO en la Gestión de Recursos Naturales y Medio Ambiente.
Para el directivo de la FAO, es urgente adoptar medidas oportunas frente al cambio climático, en especial en los países más desfavorecidos. “El calentamiento global está provocando poco a poco cambios significativos que afectan a los recursos de estos países, algo que puede traducirse en el incremento del hambre. La escasez de agua, el aumento de las temperaturas o los cambios producidos en los mares”.
Pero, ante la crisis económica mundial, se hace necesario recordar al mundo que no todas las personas trabajan en oficinas y fábricas. Y según la FAO, esta dificultad acecha también a las pequeñas explotaciones agrícolas, donde el 70 % de los hambrientos del mundo vive y trabaja, alertando acerca de la existencia de un incremento estimado de 105 millones de hambrientos en 2009, lo que suma unos 1 020 millones de mal nutridos en el mundo.
Significa que casi una sexta parte de la humanidad padece hambre. Se requieren más inversiones públicas y privadas de características selectivas, destinadas a fomentar y facilitar la inversión, sobre todo, por parte de los propios agricultores.
En este día, la FAO, nos invita a reflexionar sobre las cifras mencionadas y el sufrimiento humano a causa de este problema, afirmando además que con crisis o sin ella, tenemos los conocimientos precisos para hacer algo con respecto al hambre y que también tenemos la capacidad de reunir dinero para resolver problemas cuando los consideramos importantes.
“Estamos ante una gran oportunidad para que se inicie una cruzada para garantizar que el hambre sea reconocida como un problema esencial, el cual que requiere de una toma de conciencia de todos para resolverlo y la Cumbre Mundial sobre la Seguridad Alimentaria propuesta por la FAO podría resultar fundamental a fin de erradicar el hambre”.