Valencia no se sumó inicialmente al proceso de lucha por la independencia de España, cuyo punto ebullición se suscitó el 19 de abril de 1810, con la renuncia del capitán general de Venezuela, Vicente Emparan; aunque posteriormente lo respaldó.
El apoyo inicial no se dio, según el historiador Elis Mercado, porque en Valencia predominaba una población de canarios, pardos y esclavos. Y el movimiento de emancipación que se gestaba en Caracas, estaba dirigido por mantuanos.
Los pobladores de Valencia consideraron que no podían respaldar un movimiento orquestado por grupos que los tenían dominados desde el punto de vista económico.
También tomaron en consideración que se trataba de un movimiento centralista, que no tomaba en cuenta la posible participación de las provincias. Cuando se declaró la independencia, el 5 de julio de 1811, ya la provincia de Valencia estaba respaldando.
Mercado, miembro correspondiente de la Academia Nacional de la Historia, por el estado Carabobo, es del criterio que los hechos acaecidos en Venezuela el 19 de abril de 1810, constituyeron un episodio político civil y no militar, como lo han querido hacer ver algunos historiadores.
A su modo de ver, lo ocurrido en esa oportunidad, fue una demostración de sagacidad política de la clase mantuana, predominante en la época, para no propiciar un enfrentamiento directo con la monarquía que estaba en serias dificultades en España, por la presencia de los franceses.
El historiador considera que los mantuanos asumieron esa posición, para dar tiempo a que se organizara una verdadera rebelión frente a la monarquía. Lo que desencadenara en lo que ocurrió posteriormente, el 5 de julio de 1811.
Estima que lo del 19 de abril fue una demostración de inteligencia de unos, mezclada con la excesiva prudencia de otros, para sublevarse contra el dominio español. Sin que se notara demasiado, y evitarse así unas reacciones no deseadas.
En cambio, el día 5 de julio se lanzaron los gritos, claros y limpios, de la determinación independentista. Ya sin la excusa hipócrita de estar salvaguardando “sagrados” derechos de don Fernando VII.
Mercado subraya que hay tergiversación, cuando se intenta manipular la historia, con lo que considera el torniquete bélico, militarista.
En su opinión, una interpretación de ese tipo es un energizante para el ejercicio autoritario del poder. Y a las cosas hay que ubicarlas en su justo lugar.
“La gesta independentista fue básicamente un hecho civil, lo cual no significa que no hubiese un desarrollo militar”.
Cita que los documentos emanados del 19 de Abril de 1810 y del 5 de Julio de 1811, no son partes de guerra, pregones de batalla, ni himnos de combate, sino documentos civiles, políticos.
Subraya que la figuras de los civiles Juan Germán Roscio y Francisco Isnardi, en la gesta libertaria.
“De las manos de Roscio sale el documento más brillante y encomiable de la independencia de toda América Latina: El triunfo de la Libertad sobre el despotismo”.
Un 19 de abril, hace 219 años
Wikipedia reseña que El 19 de abril de 1810 marcó el inicio de la lucha por la independencia del dominio español en Venezuela.
Vicente Emparan, el capitán general de Venezuela, fue destituido por una asamblea que se dio en el cabildo de Caracas, dando paso a la formación de la Junta Suprema de Caracas. Oficialmente se llamó Junta Suprema Conservadora de los Derechos de Fernando VII, la primera forma de gobierno autónomo.
Se firma también el acta del 19 de abril de 1810, actuando en nombre de Fernando VII, rey depuesto de España. Se declara en desobediencia a José Bonaparte, hermano de Napoleón Bonaparte.
El 2 de marzo de 1811 se instala el Primer Congreso Nacional, con lo que se le puso fin a la referida junta. Se nombra un triunvirato compuesto por Cristóbal Mendoza, Juan Escalona y Baltasar Padrón.
El 5 de julio de 1811 se procede finalmente a firmar la declaración de independencia, conformándose así la Primera República, que luego colapsó por la reacción realista.