Washington, 9 dic (EFE).- El presidente saliente de EE.UU., Donald Trump, aseguró este miércoles que intervendrá para respaldar una petición para que el Tribunal Supremo estadounidense bloquee la victoria en cuatro estados clave del mandatario electo del país, Joe Biden.
El caso, presentado este martes ante el Supremo por el fiscal general de Texas, el republicano Ken Paxton, tiene muy pocas perspectivas de prosperar, pues la máxima instancia judicial ya ha rechazado al menos una petición similar de revertir el resultado en Pensilvania.
«INTERVENDREMOS en el caso de Texas (y de muchos otros estados). Este es el caso más importante. ¡Nuestro país necesita una victoria», tuiteó Trump, que se niega a reconocer su derrota en las elecciones del mes pasado.
La demanda de Texas busca impedir que cuatro estados en los que ganó Biden -Georgia, Michigan, Pensilvania y Wisconsin- certifiquen la victoria del demócrata el próximo lunes, cuando el Colegio Electoral se reunirá para ratificar formalmente al próximo presidente.
El argumento de Texas es que los gobernadores de esos estados usaron supuestamente la pandemia de la covid-19 como un «pretexto» para cambiar las reglas electorales y permitir mayor voto por correo, una opción que eligieron millones de estadounidenses.
A esos cuatro estados les corresponden en total 62 votos en el Colegio Electoral, de manera que si el Tribunal Supremo se posicionara a favor de Paxton el resultado de las elecciones podría cambiar, ya que ahora Trump acumula 232 votos y Biden 306, por encima de la barrera de 270 necesaria para alcanzar la Casa Blanca.
Sin embargo, el Supremo ya ha insinuado que no está dispuesto a intervenir en el desafío de Trump al resultado de las elecciones y sus denuncias sin pruebas de fraude, que ya han desestimado decenas de tribunales.
La máxima corte del país rechazó este martes una demanda presentada por los aliados de Trump para revertir el resultado en Pensilvania, en un duro golpe a las perspectivas del mandatario saliente.
El Alto Tribunal está integrado por tres jueces progresistas y seis conservadores, tres de ellos nombrados por Trump.
En su tuit de este miércoles, Trump no aclaró cómo intervendría en el caso presentado por Texas, y si lo haría mediante una moción de respaldo presentada por su campaña electoral o a través del Departamento de Justicia.
Además de su estrategia legal, el presidente está tratando de influir en republicanos locales para que invaliden la victoria del demócrata en sus estados haciendo uso de los legislativos en manos conservadoras, como en Georgia, Michigan o Pensilvania.
Trump ha pedido a líderes republicanos en estos estados que pasen por encima del resultado de los comicios y que los legislativos asignen directamente los compromisarios al Colegio Electoral, otra vía que difícilmente dará frutos.
«Veamos si alguien tiene la valentía, ya sean los legislativos (estatales) o un juez del Tribunal Supremo, o varios, para hacer lo que todos en este país saben que es correcto», afirmó Trump este martes durante un acto en la Casa Blanca, en un abierto reconocimiento de sus presiones para cambiar el resultado de las elecciones.