Tanto los que llamaron a no votar, como los que secundaron la participación electoral, coinciden en la necesidad de reunificar las fuerzas que adversan el Gobierno, y aunque no poseen una ruta clara de accionar, informaron que trabajan en la organización de los partidos junto a los factores de la sociedad civil para empoderar a los ciudadanos del accionar político
Yoerli Viloria
Las últimas elecciones del pasado 20 de mayo significaron una división aún más notoria dentro de las fuerzas que adversan al Gobierno nacional, quienes en la actualidad parecen estar bajo perfil en el escenario político. Mientras unos llamaron abiertamente a no votar como una estrategia de boicot electoral para deslegitimar a Nicolás Maduro, otros insistieron en aferrarse a una oportunidad de cambio. Si tenían razón o no, no parece ser la pregunta que ocupa a los ciudadanos, sino ¿ahora qué?
Carlos Andrés González, secretario general regional de Acción Democrática, expresó que el rechazo mayoritario de la población al Gobierno durante los comicios generó que Venezuela se acerque al final del ciclo de devastación del país por parte de los que ostentan el poder. “La dinámica de la crisis estructural irá guiando la salida del Gobierno del poder”, acotó.
El también diputado de la Asamblea Nacional indicó que los partidos, junto a los actores de la sociedad civil y todos los grupos organizados, continuarán con el desconocimiento del Consejo Nacional Electoral, “nos declaramos en resistencia, a eso se va a sumar las protestas populares. Desde los partidos seguiremos fortaleciendo las estructuras para empujar el cambio”.
Manuel Rivero, ex coordinador regional del comando de campaña presidencial de la oposición, reiteró que el 20 de mayo perdieron todos los venezolanos, “algunos sectores de la oposición promovieron la abstención y con ello la derrota de la democracia. El resultado no condujo a nada, pero ese es un episodio que hay que superar y volver a centrarnos en la unidad”.
Para el dirigente de Copei es urgente la reunificación de las fuerzas disidentes al Gobierno no para escoger candidatos, sino para enfrentar al régimen, “hacerle oposición mediante la protesta y la propuesta. Tenemos que proponer soluciones a los problemas del país”. Añadió que los dirigentes que llamaron a la abstención deben reconocer su error ante el país al tirar por la borda una oportunidad real de cambio, “y los que promovimos el voto también tenemos que reconocer que solos no podíamos”.
Por su parte Yoni Toro, responsable regional de Voluntad Popular, manifestó que la no participación electoral derivó en mayor desconocimiento al régimen por parte de la comunidad internacional, además de las sanciones a personeros del Gobierno, “fue una acción de desobediencia civil que dio resultados concretos”.
El dirigente señaló que la oposición no está de brazos cruzados, “estamos adelantando procesos de organización social y política que permitirá que los venezolanos se empoderen del accionar político, a fin de evidenciar a través de las protestas populares que se están dando que el único culpable de los padecimientos es la dictadura de Maduro y la solución vendrá únicamente con su salida del chavismo del poder”.
Escenarios
Ante algunos escenarios electorales que ya han sido mencionados por la dirigencia del Psuv y que pudieran estarse suscitando en el país en los próximos meses: referéndum contra los diputados de la Asamblea Nacional, comicios de concejales y el referéndum consultivo constitucional, la oposición nuevamente se enfrentará a la disyuntiva en su accionar.