Táchira/ «Don Vicente», el hombre más longevo del mundo llega a sus 113 años

Don Vicente, como lo llaman en el pueblo, fue galardonado el pasado 17 de mayo de 2022 por la organización Record Guinnes, como el hombre más longevo del mundo. Este viernes 27 de mayo está cumpliendo sus 113 años, describiendo que una copa diaria de miche (licor andino) es parte de su secreto de vida

"Don Vicente" es el motivo de orgullo de Venezuela, el Táchira y San José de Bolívar. Fotos: Carlos Eduardo Ramírez

113 años cumple este viernes 27 de mayo Juan Vicente Pérez, el hombre más longevo del mundo, certificado por la organización Récord Guinnes el pasado 17 de mayo de 2022. La noticia ha sido motivo de orgullo y algarabía para los venezolanos, para los tachirenses y sobre todo para los habitantes de San José de Bolívar, municipio Francisco de Miranda.

“Don Vicente”, como lo llaman en el pueblo, nació la localidad de El Cobre, municipio José María Vargas, pero desde los cinco años de edad se fue a vivir con su familia a la aldea Los Pajuiles, en San José de Bolívar, donde creció trabajando como agricultor, y formó una familia en la cual engendró 11 hijos, y ahora cuenta 43 nietos y 13 tataranietos, quienes están regados por el país y el mundo.

Juan Vicente Pérez nació en El Cobre, y a los 5 años fue trasladado a San José de Bolívar. Foto: Carlos Eduardo Ramírez

El día a día de Vicente transcurre en su silla de ruedas. Lo primero que hace al despertar es tomarse un café caliente, y después de su jornada de aseo personal y desayuno (arepa con queso), a cargo de su hija y nieta, comienza a rezar el rosario en su habitación. Hasta las tres de la tarde reza cinco rosarios, por lo que en sus manos siempre sostiene una camándula color blanco.

«Don Vicente» junto a uno de sus once hijos, en su vivienda en San José de Bolívar. Foto: Carlos Eduardo Ramírez

Cuando hay clima cálido, lo llevan a tomar el sol. Se alimenta de manera sana, con comida blanda, cero frituras, sin condimentos. Consume sopas y ensaladas, con una nutrición balanceada. La cena la hace entre 5 y 5:30 de la tarde, para posteriormente llevarlo a descansar.

Todos los domingos a las 11 de la mañana escucha la misa por radio, pues ya no puede acudir de manera presencial, como lo hizo a lo largo de su vida.

El hombre más longevo del mundo reza cinco rosarios diarios. Foto: Carlos Eduardo Ramírez

“El abuelo no envejece”

Orleida Domador, es nieta del abuelo Vicente. Asegura que siempre ha sido un hombre alegre, difícil de molestarse y sereno. “El abuelo no envejece, cada vez le veo menos arrugas. Desde que tengo uso de razón, mi imagen interna siempre ha sido así, tranquilo, relajado, ora por todos, reza todo el día, nunca lo veo molesto, siempre tiene buen carisma. Se alegra mucho cuando venimos de visita”, expresó.

Orleida, nieta de Don Vicente, está encargada de su cuidado. Foto: Carlos Eduardo Ramírez

Al relatar el proceso para alcanzar el Récord Guinnes, manifestó que un familiar cercano se propuso a anexar los documentos y las pruebas necesarias para que se comprobara la longevidad del abuelo, desde hace más de tres años. Como se encuentra activo por el Instituto Venezolano del Seguro Social (IVSS) como calidad de pensionado, y también aparecía hasta hace poco registrado en el Consejo Nacional Electoral (CNE), así como en el Seniat, pudieron certificar sus años.

“El abuelo pasa a una posición, y de acuerdo a los recaudos que van solicitando, la recaudación de datos, ellos van viendo la estadística para irlos incorporando. Es como una plataforma. En América Latina tienen un instituto, y ellos le pasan información a la sede principal. Creo que la matriz del instituto está en Inglaterra, que es la que trabaja directamente con el Récord Guinnes, entonces la comitiva de América Latina es la encargada de buscar a los abuelos de este lado, y empezaron a pedir fotocopia de cédula, validación de datos de partida de nacimiento, que todo concuerde. El abuelo va subiendo de posición si alguno va falleciendo”.

Cuando la familia se enteró de que Vicente era el hombre más longevo del mundo sintió una emoción que no saben describir, pues durante años lo han cuidado y protegido con amor. Siempre buscan unirse como familia y pasar con él sus cumpleaños y Navidad, porque no saben cuándo será la última vez. .

Juan Vicente Pérez tiene 43 nietos y 13 tataranietos. Foto: Carlos Eduardo Ramírez

“Es una dicha para nosotros, un orgullo, una historia que contar, pues nuestros hijos van creciendo y nosotros les contamos esta experiencia y ellos a su vez le contarán a sus hijos, y quedará el recuerdo”.

La certificación física del Guinnes no la han recibido y no saben cuándo será, pero Orleida comenta que para San José de Bolívar ha sido motivo de celebración, tanto así que los vecinos de la zona han estado visitándolos. “Sienten un orgullo saber que su municipio está en los ojos del mundo, porque dicen: un rinconcito del estado Táchira, un pueblo humilde del estado Táchira, es donde arroja el hombre más longevo del mundo. Eso es un orgullo para todos los habitantes de acá”.

Diariamente le chequean la presión arterial a Juan Vicente Pérez. Foto: Carlos Eduardo Ramírez

El palito de miche

El director de Turismo de la alcaldía del municipio Francisco de Miranda, Jesús Rojas, explicó que el “miche” al que Don Vicente ha vuelto famoso, proviene de la panela, después de un proceso de maceración.

“Ciertamente pues la panela reposa para luego ser cocinada en una caldera, y ese vapor se va a convertir en el famoso miche. Él nos dice, no en exceso, pues así hay que consumirlo, no en exceso”, dijo.

Don Vicente come sano, se toma una copa pequeña de «miche» al día, duerme y reza. Foto: Carlos Eduardo Ramírez

La exalcaldesa del municipio Francisco de Miranda, Mercedes Rodríguez, indicó que durante los cuatro años que estuvo en el cargo, le brindó asistencia médica a “Don Vicente”, quien ha sido un hombre sano, a pesar de su edad.

Aseguró que la población está orgullosa de tenerlo. “La gente está muy feliz de que va a venir mucha gente al pueblo a visitarnos. Es un orgullo tener al hombre más longevo del mundo, de verdad es un orgullo para todos nosotros”.

En la población lo recuerdan como un hombre trabajador, noble, que nunca se trasnochaba, y que “el palito de miche” antes del almuerzo es el que lo mantiene bien, además de comer sano. “Las carnes rojas muy poco las come, le gusta mucho la ensalada y el guineo. Lo otro es la tranquilidad, no era un hombre que le gustaran las parrandas”.

Foto: Carlos Eduardo Ramírez

 

Foto: Carlos Eduardo Ramírez
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