La ausencia de niños alcanzó el 15% en el Táchira, según precisó el presidente de la Federación Nacional de Trabajadores de Educación de Venezuela –Fenatev- Gerardo Ramírez.
Pero no sólo cifras se conocieron, sino testimonios como los de Carolina Rodríguez quien rompió en llanto al ver la escuela Ramón Buenahora de San Cristóbal, tan vacía. Ahí estudia su hija y extrañó lo que era antes, cuando la llevaba.
“Llegue a las 7:30 de la mañana a traer a mi hija, pero hay muy pocos niños y ellos no quieren quedarse solos hoy, por eso la acompañó. Necesitamos sacar adelante nuestros niños a pesar de todo…Da mucho sentimiento –llanto- antes había mucha alegría, los niños corrían, gritaban… Hoy sin palabras”.
La directora de la escuela estadal Ramón Buenahora, Bella Osorio, dijo que llegaron a trabajar un 99,9 % de los profesores, pero muy pocos estudiantes, estima la ausencia en un 12%.
“Están inscritos hasta ahora 230 niños, y antes había una matrícula de 700 a 800, pero por la situación país, todo ha cambiado”, relata la profesora, quien a pesar de las dificultades preparó junto a los representantes una emotiva bienvenida a los pocos niños que asistieron, con personajes de Disney que animaron el día.
Claudia Vargas, llevó a su hijo a la escuela en La Concordia, estado Táchira, dijo sentir un vacío muy grande al ver la escuela casi vacía. “Yo traje a mi hijo, no hubo para comprarle si no una parte de los útiles poco a poco los fui comprando. Pero lo trajimos con el uniforme, los zapatos y de las demás cosas del año pasado”.
Sólo un dedito de maíz para comer
Ender Robles, subdirector de la escuela bolivariana, Ramón J. Velázquez, señaló que hay inscritos 275 estudiantes de los 483 que estaban inscritos el pasado año y 104 niños asistieron hoy.
“Los docentes si asistieron todos, pero todos conocemos la situación del país, por eso vemos menos afluencia de estudiantes este inicio del año escolar, asistió como un 35% a 40% de la matrícula”.
También relató el docente que hoy se comenzó a dar desayuno en esa escuela bolivariana, ubicada en barrio Sucre, de San Cristóbal. Lo que sirvió a los escolares fue deditos de harina de maíz dulces, “mañana si comenzaremos a dar almuerzos”.
Comienzo amenazado
Eliana Sánchez, es docente estadal en el Táchira, ella junto a sus compañeros acudieron hoy al llamado a clases, “lo hacemos por la vocación y porque trabajamos de corazón, pero con el salario de Bs. 57 mil que nos llegó la última vez, porque está quincena ni la hemos cobrado, no se puede uno ni comprar medio cartón de huevos”.
Agregó Sánchez que los niños tienen derecho a recibir educación, pero los docentes también tienen hijos que tienen derecho a comer, “no hay transporte, no hay transporte, no hay efectivo, el salario no alcanza y aun así, asistimos a la institución a trabajar. Pero no descartamos un paro por nuestras condiciones de trabajo”.