El pasado viernes 1º de junio, un grupo de artesanos tenía previsto dirigirse a Betijoque. Las personas partieron a bordo de un camión que se detuvo en el camino para darle la cola a seis ciudadanos más. Por La Bajada del Río, cerca de El Mirador; el camión volcó y cayó a un barranco de aproximadamente 200 metros. A diez días del trágico hecho, dos de sus sobrevivientes contaron lo sucedido en entrevista exclusiva para el Semanario de Los Andes
Carlos Alberto Flores. ECS
Cuatro artesanos se reunieron a las afueras de una empresa dedicada a la fabricación de cestas artesanales en sector Cantarrana, parroquia Campo Alegre del municipio San Rafael de Carvajal para trasladarse en un camión hacia la población de Betijoque con la finalidad de buscar materia prima para así elaborar la mercancía.
Mientras se desplazaban por La Bajada del Río, cerca de El Mirador, el conductor del vehículo, supuestamente, perdió el control y cayó a un barranco con cerca de 200 metros de profundidad. Rápidamente se apersonaron los cuerpos de rescate para salvar la vida de los involucrados.
En el hecho perdió la vida inmediatamente Fernando José García Valero, de 33 años. Al lugar acudió el Cuerpo de Bomberos, Protección Civil y una comisión de la Policía Estadal. Las autoridades lograron rescatar a siete personas, las cuales fueron trasladadas a la Emergencia del Hospital Central de Valera. Horas después, cerca de las 3:30pm, Miguel Ángel Matheus García (28) falleció. La tragedia había cobrado su segunda víctima.
Los lesionados fueron identificados como: Leny Yenns Briceño Valecillos (20), José Nolverto Segovia (63), José Gregorio Matheus Ramírez (28), José Heriberto Gutiérrez Araujo (46), Jesús Enrique García Montilla (34) y un infante de apenas once años, nieto de Segovia. Briceño, bombero de profesión se mantiene hospitalizado en el nosocomio valerano, al igual que Gutiérrez. El niño fue trasladado a una Clínica Hospitalaria en Maracaibo, estado Zulia. García Montilla, por su parte, fue dado de alta tras recuperarse.
Sobrevivientes rompen el silencio
El equipo de investigación de la fuente de sucesos del Semanario de Los Andes visitó el sector Cantarrana en busca de testimonios de las personas menos perjudicadas por el volcamiento. José Gregorio Matheus Ramírez, de 28 años, no titubeó al momento de declarar a la prensa lo acontecido aquella mañana.
“Ese día nos reunimos a las 9:30am para ir a Betijoque a buscar materia prima para las cestas, bajamos a Sabana de Cuba a buscar a otro chofer por si acaso hacía falta, pero nos dijo que no iba a ir porque era tarde. Luego pasamos por la plaza Colón y nos detuvimos para darle la cola a tres personas”, comentó.
Sentado en una silla de ruedas y con el pie izquierdo vendado debido a una fisura que sufrió en el acontecimiento, prosiguió con el relato. “Yo iba de copiloto, me sentí incómodo porque el chofer no hablaba, le sacaba conversa pero no decía nada. Le pregunté que cuánto tardaríamos en llegar y me dijo: ‘Ahorita llegamos, eso es rapidito’”, contó.
“Cuando íbamos cerca de El Mirador bajó la velocidad y se metió a la plaza que está ahí, luego aceleró, le metió segunda, tercera y cuarta. No me dio tiempo de reaccionar, nunca tomé el volante ni nada, eso es mentira, jamás forcejeé. El camión se alzó unos 50 metros y me coloqué rápidamente en posición fetal para amortiguar el golpe”.
“Mi cabeza se estrelló contra el parabrisas y me golpeé la pierna. Cuando reaccioné, vi al conductor, fue el que salió prácticamente ileso, solo lesiones leves tenía. Mientras intentaba salir del camión escuché que dijo: ‘¡Co#@, no me maté, ahora voy a ir preso!’. Apenas lo oí me dio mucha rabia y le pedí que ayudara a los demás. No hizo nada, solo se sentó a esperar”.
Por otra parte, José Nolverto Segovia, de 62 años, y conocido cariñosamente como “Carpintero”, se hallaba sentado sobre la acera de su vivienda, con la mirada perdida y con signos de dolor cuando intentaba moverse. Su preocupación no eran las molestias que sentía, sino su nieto, quien fue trasladado de emergencia a un centro clínico de Maracaibo en una avioneta.
“Todo sucedió muy rápido, yo me encontraba con mi nieto de once años en la plaza Colón y pedimos la cola para Valera, ya que íbamos a comprar algunas cosas para la casa. En el trayecto escuché al conductor decir: ‘Hasta aquí llegamos’. Luego desvió el camión hacia el barranco y di vueltas, reboté y caí finalmente. Mi nieto gritó: ‘¡Abuelo!’, y dije: ‘Estás vivo mi niño, gracias a Dios’”, aseveró.
Indignado y triste por lo acontecido, “Carpintero” hizo saber al equipo reporteril su molestia para con el chofer, al cual lo catalogó de irresponsable. “Ese hombre es un asesino, si quería morir tenía que hacerlo solo. Es un delito lo que hizo, debe pagar”, sentenció.
“Exigimos justicia”
Amarinta García, José Jorge Matheus, María Matheus y Yohana Lozada, madre, padre, hermana y pareja de Miguel Ángel Matheus García (23), respectivamente, manifestaron estar dolidos por lo ocurrido. En la sala de su vivienda, le abrieron las puertas a la prensa y contaron detalles acerca de la vida de Miguel Ángel, que falleció ese mismo día horas después del accidente.
“Pedimos justicia, ese chofer debe pagar por lo que hizo, sabemos que le han hecho exámenes y no tuvo ningún infarto, además el camión no presentó fallas”, comentaron. Su ser querido era obrero, tenía amplios conocimientos en las ramas de la electricidad, albañilería y construcción. Dejó en orfandad a un pequeño de tan solo año y medio de nacido.
Llamado a las autoridades
Los familiares de las víctimas afectadas por la tragedia hicieron un llamado a las autoridades competentes para que esclarezcan el caso y así inicien los respectivos trámites para enjuiciar al conductor del camión. La pérdida de control del vehículo fue la principal hipótesis que manejaron las autoridades, pero con el relato de dos sobrevivientes, cambia totalmente el panorama en la investigación.