Parte IV
Los acueductos de Sabana de Mendoza desde 1890 hasta el Triestadal Torondoy (1975), haciendo una descripción física e histórica del territorio del Municipio Sucre, con referencia a sus fuentes naturales de agua.
La principal corriente de agua era la quebrada la Vichú, nace en la serranía del Palmichero del Municipio Escuque y la cual limita con el Municipio Bolívar, capital Sabana Grande, desde el Zanjón Las Palmas hasta el Zanjón de las Lapas hasta unirse muy cerca del río Cheregüé. Pie del Cerro Zaragoza, dentro de una frondosa arboleda un manantial, cuyas aguas corrían hasta depositarse en lo que es hoy los terrenos de la Vinccler y el sector La Bandera, hoy parroquia Valmore Rodríguez.
En los grandes veranos la población se abastecía transportando en mulas, burros y en vasijas sobre la cabeza, tanto de este manantial llamado las casimbas como de la quebrada La Vichú. También existió una pequeña quebrada que nacía en un cerro llamado Tierra’e Loza, entre El Dividive y el caserío El Toro, sus aguas bajaban hasta el zanjón del Toro. Se comentaba que cuando la empresa del ferrocarril construyó el puente sobre el zanjón, el personal obrero hacía uso de esas aguas para consumo porque la consideraban de alto grado de potabilidad.
Primer acueducto: El primer acueducto que se construyó en la población de Sabana de Mendoza fue diseñado por los ingenieros Enrique Lantier y Francisco Billy, surtidos por el agua de la Vichú. Dependía de una tubería que bajaba hasta un estanque que se hallaba junto a la estación del ferrocarril, este estanque estaba dividido en dos compartimientos, uno cubierto y de uso exclusivo para la empresa y el otro destinado al abastecimiento de la población, había sido construido en 1890, sin embargo, ante las crecidas de la Vichú, la empresa tenía que ubicar cuadrillas de obreros para su limpieza y se vio a comprarle a Concha Bencomo la acequia que ella había construido desde el río Motatán hasta el Cequión, donde la compañía ferrocarrilera construyó un pozo cisterna e instaló un sifón para abastecer a las locomotoras. El primero de enero de 1901 el acueducto pasó a manos de la municipalidad, apenas duró quince años de servicio por falta de mantenimiento.
Las casas comerciales y muchas residencias fueron construyendo estanques de concreto que de cierto modo ayudaban a mitigar la escasez del agua en la población. Esta situación dio lugar que en la inauguración del servicio eléctrico que provenía de una planta de Betijoque, y estando presente el Dr. Miguel Toro Chemies, secretario general de gobierno del Estado, el pueblo le exigió la construcción del acueducto, la cual ordenó la construcción de un acueducto más amplio y desde un sitio de la misma quebrada que ofrecía mejor seguridad y regularidad en el servicio, también se perdió por desidia de quienes estaban encargados de su mantenimiento.
En 1932 la compañía del ferrocarril de La Ceiba construyó el primer pozo artesiano para el uso exclusivo de la empresa, pero en 1947, siendo gobernador del Estado el Dr. Antonio Martín Araujo, en vista de que la empresa había clausurado sus actividades, resolvió tomar el pozo, adaptándole un motor de alta potencia para ser distribuida en toda la población de Sabana de Mendoza, claro, cuando eso no existía Barrio a´Juro, hoy parroquia Valmore Rodríguez. Se instaló un grifo en cada esquina, este procedimiento fue muy valioso y dio pie para que en cada hogar se instalara una llave de paso o lo que llamaban antes, una pluma.
En 1953 el gobierno de Don Atilio Araujo construyó otro pozo para reforzar el servicio de ese acueducto, desde el año 1953 la comunidad exigía mejor servicio, ya que en 1960 empieza a expandirse Sabana de Mendoza hacia la parte baja de la panamericana, o lo que llamaban Barrio a´ Juro, hoy parroquia Valmore Rodríguez ya que en 1961 se entregaron un lote de viviendas construidas por Malariología. Eso obligó a los gobiernos de irle dando respuesta a la comunidad, hasta que en 1975 arrancaba uno de los proyectos más grandes de abastecimiento de agua potable para los municipios de tres Estados: Zulia, Mérida y Trujillo, y se inaugura el Triestadal Torondoy que abastecía de agua desde los Trementinos del Municipio “Justo Briceño” Torondoy Estado Mérida hasta el sector La Cerca del Municipio Miranda, la cual hoy se encuentra casi en un colapso total.
El primer pozo perforado en la parroquia Valmore Rodríguez data de 1968 y es el que se encuentra ubicado en la carrera tres, vía que conduce a la Urbanización El Trompillo en los terrenos de los D` Agostini y fue perforado por el antiguo INOS (Instituto Nacional de Obras Sanitarias), hoy se encuentra desmantelado y clausurado totalmente.
En 1976 vino la perforación del pozo que se encuentra ubicado en la terminal de pasajeros “Tatén Díaz” con un tanque de almacenamiento que está al lado de la familia Vieras, dicha franja de terreno fue donado por el señor Pedro Vieras; a la par de este, se construyó otro, que se encuentra ubicado en las instalaciones que fueron construidas por el Ministerio de Obras Públicas (MOP) y donde funcionó la Escuela Técnica Agropecuaria (ETA) hoy ocupadas por el colegio privado “Antonio José de Sucre” diagonal a la escuela Valmore Rodríguez y ambos pozos se encuentran en perfecto funcionamiento. El pozo del Sucre rebombea hasta la caja de agua del Jabillo, al lado de la panamericana, y desde la caja de agua del Jabillo hasta el cilindro del sector El Toro, y por gravedad, se desplaza para surtir a la parroquia Sabana de Mendoza.
En 1998 cuando se dan los inicios de la Apertura Petrolera en el bloque La Ceiba, un estudio sismográfico de Sabana de Mendoza y la parroquia Valmore Rodríguez, determinó la capacidad de agua subterránea que actualmente tenemos, con un volumen de 400 millones de litros cúbicos anuales la cual nos convierte en una de las ciudades más grandes en abastecimiento de aguas subterráneas.
* Exconcejal