Moscú, 15 dic (EFE).- El presidente ruso, Vladímir Putin, rechaza una «tregua artificial» y, en cambio, apoya una «paz de verdad» para Ucrania, según informó hoy el Kremlin.
«El presidente Putin está abierto a la paz, a una paz de verdad, a decisiones serias, y en lo que está totalmente en contra son las argucias para ganar tiempo y crear treguas artificiales», dijo Dmitri Peskov, portavoz presidencial, en su rueda de prensa telefónica diaria.
También se negó a especular sobre si será posible alcanzar un acuerdo sobre el plan de paz de Estados Unidos antes de que termine este año, como, según la prensa, exige el presidente estadounidense, Donald Trump.
«No me atrevo a hablar de plazos. Esa sería ahora la labor más ingrata», comentó.
Peskov consideró que «Trump trabaja honestamente en favor del arreglo (…) y aplica todos los esfuerzos para ello. Y su equipo también. Nosotros valoramos altamente esos esfuerzos».
En cuanto a la negativa rusa al ingreso de Ucrania en la OTAN, subrayó que «es una de las piedras angulares» del proceso, que exige «una discusión especial».
El representante especial del presidente de EE.UU. para misiones de paz, Steve Witkoff, aseguró este domingo que se lograron progresos «considerables» en las negociaciones en
Berlín con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, consultas que continuarán hoy, lunes.
Tras la reunión en la Cancillería alemana en Berlín, que duró más de cinco horas, Witkoff afirmó en la red social X que se mantuvieron conversaciones «en profundidad» sobre el plan de paz de 20 puntos.
El Kremlin rechazó el domingo de antemano las modificaciones que ucranianos y europeos han introducido al plan de paz original presentado por la Casa Blanca.
«Si se producen las modificaciones correspondientes, nosotros tendremos objeciones muy fuertes», dijo Yuri Ushakov, asesor de polítia internacional del Kremlin, a la televisión pública rusa.
Añadió que esas objeciones pueden incumbir «a muchos puntos». «Allí habrá cláusulas absolutamente inaceptables para nosotros, incluido en el tema territorial», explicó.
«El tema territorial se abordó activamente en Moscú. Y los americanos no sólo conocen, sino que comprenden nuestra postura. No sé lo que saldrá en papel después de esas consultas. Pero difícilmente será algo bueno», señaló.
