La carencia de gas y agua, en el estado Trujillo, también perjudica al transporte público. Los usuarios deben caminar largos tramos para abordar en las unidades y los conductores aprovechan para cobrar doble. El Bus Trujillo, por otro lado, suspende las rutas por temor a daños
María Gabriela Danieri
Las protestas por la escasez de gas y agua potable, en el estado Trujillo y principalmente en el municipio Valera, han empeorado el servicio del transporte público y privado de la región.
La mayoría de las manifestaciones se ejecutan con cierre de vías, por lo cual los conductores deben acortar sus rutas y tomar vías alternas para llegar a sus paradas. En consecuencia, los usuarios deben caminar largos tramos para abordar las unidades o llegar a sus casas.
Aumento indebido
Aunado a la falta de unidades, los transportistas de las líneas autorizadas y los piratas, aprovechan estas situaciones de conflicto para cobrar doble pasaje. Quienes quieran llegar a La Puerta, desde el centro de Valera, deben pagar hasta 50 bolívares; y quienes deban ir a Carvajal, deben desembolsillar hasta 20 bolívares soberanos.
Cifras que no son legales, de acuerdo a los últimos acuerdos del gobierno con el gremio del transporte.
Sin Bus Trujillo
Por otro lado, los usuarios del Bus Trujillo denunciaron que el ambiente de conflicto, también ha desmejorado el servicio de esta empresa, que saca de circulación a los buses, si hay manifestaciones.
Hace dos semanas que decidieron suspender la ruta hacia La Puerta, pues una comunidad, que protestaba por gas, rompió el vidrio de la unidad y golpeó al conductor.