Caracas, 10 jun (EFE).- La ONG Justicia, Encuentro y Perdón (JEP) denunció este martes que «muchos» de los extranjeros que han sido detenidos en Venezuela por supuestas razones políticas no han tenido acceso a sus consulados, lo que, a juicio de la organización, constituye un «acto deliberado de aislamiento» que contraviene las normas internacionales.
«Muchos han sido privados de libertad sin acceso a sus consulados, sin defensa adecuada, sin información a sus familias. Algunos incluso enfrentan cargos inverosímiles o juicios irregulares», sostuvo JEP en un mensaje en su cuenta de X, que exigió la liberación de estos ciudadanos extranjeros y de venezolanos con doble nacionalidad.
Para la organización, «encarcelar extranjeros por razones de Estado o como represalia política» representa no solo una «injusticia», sino también «un acto de aislamiento deliberado y reconocido por la doctrina como ‘diplomacia de rehenes'».
El respeto a las normas internacionales, prosiguió la ONG, «no es opcional».
Según la ONG Foro Penal, en Venezuela hay 927 personas que considera como «presos políticos», 82 con doble nacionalidad, la mayoría detenidos tras las presidenciales de julio de 2024, cuando se desató una crisis a raíz de la denuncia de fraude de la mayor coalición opositora, que considera que su candidato, Edmundo González Urrutia, ganó esta contienda y no el mandatario Nicolás Maduro, como proclamó el ente electoral.
El Gobierno de Venezuela, por su parte, asegura que en la nación caribeña no hay presos políticos, sino personas que fueron detenidas -sostiene- por haber cometido delitos.
En mayo pasado, el Ejecutivo chavista denunció la detención de más de 70 personas, entre los que hay varios extranjeros de nacionalidad pakistaní, albanesa, argentina, alemana, por estar presuntamente implicados en un plan para boicotear las elecciones regionales y legislativas del pasado 25 de mayo.