Yanara Vivas /DLA.- Son muchas las mujeres quienes hoy, 8 de marzo merecen el reconocimiento de la sociedad en general, por ello hemos seleccionado a un grupo de guerreras, cuyas vidas son ejemplo de gallardía, esperando a través de ellas, rendir homenaje y reconocimiento a todas las Mujeres con Guáramo.
«Activa, guerreando ante la adversidad”
Janneth Hernández con 33 años de servicio en Hospital II de El Vigía, Municipio Alberto Adriani. Janneth es madre de 4 hijos y abuela de 5 nietos. Con diplomados en Gerencia Publica, Materno Infantil, Emergencia Obstétricas, entre otros.
Destacó desde adolescente como líder, formando parte del Centro de Estudiantes del Ciclo Básico El Vigía, liderazgo que extendió con irreverencia a lo largo de su carrera profesional hasta la actualidad, ganándose el respeto y admiración de sus compañeros de trabajo y sociedad vigíense.
Para Janeth, el ser mujer la compromete en la defensa de la democracia del país en el que sueña volver a abrazar a varios de sus hijos y nietos, hoy fuera de Venezuela en búsqueda de mejores oportunidades. Por ello, continua en la lucha por la democracia, asumiendo el compromiso desde cada rincón donde se encuentre, tratando de ayudar a quienes lo necesiten, ante la destrucción especialmente del área de salud, donde muchas veces deben trabajar, teniendo como herramientas y protección su fe y amor al prójimo.
Janneth recuerda con nostalgia cuando arreglaba y entregaban cestas a parturientas de escasos recursos, durante las fechas de navidad, año nuevo y el día de la madre. Sintiendo tristeza al ver hoy, la necesidad de tantas madres que no tienen para alimentar a sus hijos, mientras las mandan a parir como si el ser madre solo se tratara de la multiplicación de la especie y la neutralización de la mujer en su rol social.
En la enfermería Janeth encontró su vocación y misión de vida, alternando de vez en cuando con la música, asegurando “de volver a nacer, volvería a ser enfermera, y sin lugar a dudas seguiré activa, guerreando ante la adversidad” levantándose de las caídas pues se siente “orgullosa de ser madre, venezolana e hija de Venezuela”
«Ser Mujer, madre y profesional es existir en lo sublime»
Nacida en la hermosa población de Canaguá, anclada en los Pueblos de Sur, la profesora Enriqueta Carrero, se considera “ciudadana del Mundo” desarrollando su vocación docente y madre consentidora desde sus primeros años de vida, hasta la actualidad.
Para Enriqueta “Ser Mujer, madre y profesional es existir en lo sublime, donde vuela la libertad de sus hijos y estudiantes, con la seguridad de mantener los brazos abiertos para el retorno, aun cuando traigan las alas rotas, tras la búsqueda de sus sueños. Siempre atenta de cada nuevo despegar a la vanguardia de los tiempos”
La docencia para Enriqueta es su gran talento, vocación y misión de vida, siendo recompensada a lo largo de más de 76 años como profesional en los diferentes niveles educativos. Manteniendo el corazón lleno de recuerdos de sus hijos, nietas y estudiantes a los que bendice a diario por ser parte de su vida.
Carrero, es líder del Movimiento vecinal por los servicios públicos en el estado Mérida, logrando engranar a su alrededor un conjunto de profesionales expertos cuyos análisis y propuestas, han dado al traste con las excusas repetitivas de quienes han llevado a la debacle la calidad de vida de los ciudadanos, sin pretender más allá del ser parte de la reconstrucción de la “Venezuela que han pretendido exterminar” asegurando con esa voz amable que sin duda sale desde su corazón “el país elevará el vuelo cual Ave Fénix, mientras sus hijos cual Salvador Gaviota darán giros de libertad responsable para una democracia perfectible, con venezolanos ejerciendo ciudadanía” Confía Enriqueta, en la reserva moral de los venezolanos ”“coronada con sabiduría amorosa de abuelas, madres y la vitalidad creativa y emprendedora de las generaciones de hijos y nietos
“Mosqueteras de la Transparencia en la gerencia pública”
Para cerrar nuestro especial, nos referiremos no a una, sino a cuatro mujeres, sin duda las “Mosqueteras de la Transparencia en la gerencia pública”
Cuatro damas, profesionales cuyas familias son el eje de fortaleza. Juntas han asumido y desarrollado en el estado Mérida, proyectos de buena gobernabilidad ejemplo de otros países, aplicables a cada sector público, plantándose de frente ante autoridades civiles proponiendo opciones para el Gobierno Abierto y luchando desde la Coalición Anticorrupción. Son ellas las merideñas Christi Rangel, Rita Coello y Angélica Villamizar, junto a la trujillana Nathalie Carrilo, nuestras mosqueteras.
Christi Rangel, economista ulandina y doctora en Ciencias Económicas y Sociales, Coordinadora de Transparencia Venezuela en la entidad merideña, con amplia experiencia reconocida como miembro de la academia de Mérida y participante en investigaciones de alto nivel, cuyo reto más grande es ser madre por partida doble, procurando dedicar tiempo de calidad a su familia. La profesora Christi ha encontrado el equilibrio en el yoga y la meditación aplicándolas en situaciones exigentes.
Rita Coello, otro ejemplo de profesionalismo formado en la Universidad de Los Andes con postgrado en España, destacada docente en la escuela de Administración, comparte responsabilidades luchando por las causas sociales. Rita, ha encontrado en la lectura y el ejercicio físico, la fortaleza para mantenerse enfocada, siendo el amor a su familia y por el país sus mayores motivaciones ante las adversidades.
Angélica Villamizar, politóloga con maestría en Economía mención Política Fiscal, investigadora y docente del Instituto de Investigaciones Económicas de la ULA, quien con carácter dulce y tranquilo, pero decidida y visionaria con gran capacidad de análisis y desarrollo de estrategias, facilita el logro de objetivos mediatos al equipo sin dejar de lado a su familia, como su principal apoyo.
Cerramos con Nathalie Carrilo, criminóloga con experiencia en trabajo social y relaciones con instituciones gubernamentales, comparte su tiempo participando en proyectos desde Cátedra de la Paz, en la ULA. Nathalie, ha demostrado capacidad proactiva, organización y disciplina, sin duda obtenidas y cultivadas durante sus años como bailarina de Ballet Clásico, una de sus grandes pasiones, siendo su familia el complemento y pilar de su vida, comprometida, decidida, equilibrada ante las presiones, logrando aportar herramientas espirituales, actuando con serenidad y una sonrisa en los momentos difíciles.
Seguramente muchas mujeres con guáramo se verán identificadas en quienes hoy forman parte de nuestras líneas, al desarrollar proyectos, participar en diversas actividades, aportando a diario, desde la ciudadanía, su granito de arena para la recuperación y correcto desarrollo del país, que como mujeres, deseamos para nuestros hijos y nietos; soñando y trabajando por ese abrazo del reencuentro, orgullosas de ser las privilegiadas hijas de Venezuela, herederas de su fuerza, gallardía y arrojo, pero sobre todo de sus valores éticos, como base del país que está naciendo. Por ello, hoy 8 de marzo, honramos el privilegio de ser Mujer!