Moscú estudiará la decisión del Gobierno de Estados Unidos de suspender la tramitación de visados de no inmigrante para los ciudadanos rusos y “no descargará su enfado” con los estadounidenses de a pie, afirmó hoy el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
Al mismo tiempo, al comentar las posibles represalias rusas, Lavrov señaló que sólo puede decir una cosa: “No descargaremos nuestro enfado con los ciudadanos estadounidenses”.
La medida estadounidense, según Lavrov, busca generar descontento en la sociedad rusa.
“La primera impresión es que los autores de esas decisiones vuelven a intentar provocar descontento de los ciudadanos rusos con la política de las autoridades de Rusia”, espetó.
En cuanto a la negativa de la Embajada de Estados Unidos de tramitar visados para ciudadanos bielorrusos, para Lavrov está “tiene evidentes tintes políticos”.
Horas antes la Embajada de Estados Unidos en Moscú anunció que limitará sus actividades en Rusia debido a la reducción de su personal en este país.
“En virtud de las medidas adoptadas por Moscú para reducir la cantidad de la misión diplomática de EEUU en Rusia, a partir del 23 de agosto de 2017, suspendemos la tramitación de visados de no inmigrante en toda Rusia”, dice un comunicado en la web de la misión diplomática.
Sin embargo, se agrega que la expedición de esos visados se reanudará “con menor volumen” a partir del 1 de septiembre.
Además, la misión diplomática informó que a partir de ahora no gestionará las solicitudes de ciudadanos bielorrusos que para recibir un visado de EEUU tendrán que dirigirse a las embajadas de EEUU en Varsovia, Kiev o Vilna.
Por otra parte, los diplomáticos comunicaron que ya han procedido a organizar la salida del país de los empleados que no podrán seguir desempeñando sus funciones en Rusia desde el 1 de septiembre.
Globovisión