Prensa UNT.- La situación que se vive en la ciudad de El Vigía con relación al despacho de gasolina cada vez es más calamitosa; los conductores pasan largas horas en cola frente a las estaciones de servicio, mientras quienes laboran en el transporte público no pueden cumplir su jornada diariamente porque no hay un plan que los beneficie para abastecer sus unidades y prestar el servicio como debe ser.
Así lo denunció Carlos Pulido, secretario Electoral Municipal de Alberto Adriani por el partido Un Nuevo Tiempo (UNT), quien aseguró que en El Vigía el transporte público cada día es más limitado dentro del municipio, lo que obliga a los ciudadanos a caminar largos trayectos bajo el inclemente sol, para poder dirigirse a su lugar de trabajo o realizar diligencias personales.
La falta de un cronograma que beneficie a los transportistas de El Vigía no solo condena a los ciudadanos a caminar sino que ocasiona el incremento desorbitante en el precio del pasaje, ya que muchos de ellos alegan que para prestar el servicio deben adquirir el hidrocarburo revendido y no pueden trabajar a pérdida, dijo Pulido.
“Los transportistas que equipan sus unidades –que son pocos – comprando el combustible revendido cobran el pasaje a medio centavo de dólar, lo que equivale a un poco más de un millón 800 bolívares, si una persona para ir a trabajar toma dos autobuses son más de tres millones de bolívares, ¿qué trabajador promedio puede pagar ese monto si lo que gana es salario mínimo?”, se preguntó.
El dirigente de UNT Mérida cuestionó que siendo Venezuela un país petrolero, sus habitantes estén pasando estas adversidades. Desde nuestra organización política –dijo- nos solidarizamos con el pueblo vigiense y alzamos nuestra voz de protesta contra las malas políticas del Gobierno municipal, cuyo representante debería gobernar para todos y solventar los problemas del municipio, porque para eso fue electo.