El régimen de Nicolás Maduro está haciendo un esfuerzo para tratar de ocultarle al mundo la tragedia que significa el éxodo masivo forzoso de venezolanos que a diario huyen por las fronteras de Venezuela para salir a otros países con el objetivo de buscar nuevas oportunidades de vida, ya que en nuestro país son inexistentes debido al fracaso de las políticas económicas y sociales implementadas inicialmente de Hugo Chávez y ahora de Nicolás Maduro, expresó el parlamentario nacional jubilado y defensor de los derechos humanos, Walter Márquez.
Destacó Márquez que ha sido tan grande y constante el éxodo forzado que ha sido reflejado permanentemente por los medios de comunicación nacionales e internacionales y motivo de preocupación de organismos internacionales como ACNUR, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados; la OIM, Organización Internacional de Migración de la ONU, la Secretaría General de la OEA, organismos multilaterales y países latinoamericanos reunidos recientemente en Ecuador, donde firmaron la Declaración de Quito sobre el tema de la migración en Venezuela, en la cual se analiza la profundidad de la crisis y se hace un llamado al gobierno venezolano a contribuir a la solución de la misma.
En este sentido denunció Walter Márquez que el régimen en lugar de aceptar la situación lo que hace es lanzar una contraofensiva comunicacional pretendiendo ocultar o esconder esa realidad a través de varias estrategias, la primera de ellas fue la operación retorno de unos supuestos repatriados a través de los que ellos han llamado la “vuelta a la patria”, facilitando el viaje de regreso de venezolanos en el exterior, de quienes algunos dudan de la veracidad de los protagonistas por cuanto pudiera ser un montaje organizado por el mismo gobierno, y más recientemente hemos visto cambios en la frontera que se suman a esa pretensión del régimen de disfrazar la realidad.
«Quienes permanentemente visitamos la frontera de San Antonio, Ureña y Cúcuta hemos visto de manera directa ese éxodo masivo de venezolanos hacia el exterior, especialmente por San Antonio del Táchira en el puente Simón Bolívar, pero ahora los militares despejaron totalmente la Avenida Venezuela por donde transitaba permanentemente gente de día y de noche, al igual que lo hicieron en los alrededores del Comando de la Guardia Nacional de San Antonio, donde hasta hace poco se podían estacionar vehículos; ahora la gente tiene prohibido circular por la Avenida Venezuela y estacionar vehículos cerca del Comando de la Guardia Nacional, y además a quienes retornan de Colombia los obligan mediante barreras a desviarse al salir de la Aduana de San Antonio hacia las calles paralelas a fin de evitar que los medios de comunicación capten esa aglomeración de personas que se está yendo al exterior y otro tanto que se ve obligada a visitar Colombia para adquirir alimentos y medicinas».
Igualmente, indicó el parlamentario, para pretender desestimular a los venezolanos en la salida de San Antonio del Táchira han colocado equipos de sonido a alto volumen con canciones del folclor venezolano que evocan la nostalgia de quienes buscan irse del país con el sueño de tener una mejor calidad de vida en otro lugar, acción que activa lo que se conoce clínicamente como el “síndrome de Ulises”, o también conocido como el “síndrome del inmigrante”, al producir nostalgia por la separación forzosa, y el régimen trata de activarlo para que los venezolanos no se vayan.
Mentira como política de Estado
«El régimen de Maduro ha utilizado la mentira como política de estado, y ahora hace un esfuerzo para pretender engañar con una ofensiva comunicacional a la comunidad internacional, pero la realidad es tan abrumadora que el éxodo forzoso masivo de venezolanos es inocultable a pesar de todas las estrategias de desinformación y contrainformación por parte del régimen», aseveró.
En otras palabras –indicó- el gobierno de Nicolás Maduro y en lo personal necesita de un psiquiatra para que no se siga haciendo el loco, aunque tiene uno al lado como es Jorge Rodríguez, además debe visitar un oftalmólogo para que vea con claridad la verdad de lo que ocurre en Venezuela y especialmente en la frontera.
Éxodo forzoso es crimen de lesa humanidad
Márquez recordó que el éxodo forzoso, desplazamientos o traslado forzoso producto de la coacción a la que ha sometido el régimen venezolano a sus habitantes, obligándolos a salir al exterior en busca de nuevos horizontes representa un crimen de lesa humanidad de acuerdo al Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional en su Artículo 7, Numeral 1, literal d, situación que se ha ido incrementando a partir de agosto de 2015 con las deportaciones forzosas de ciudadanos colombianos y luego se convirtieron en traslados y éxodos forzosos.
Con esta argumentación el defensor de los derechos humanos constituyó un equipo de trabajo para investigar, documentar y denunciar estos hechos ante la Corte Penal , “porque este éxodo masivo que se está desarrollando intensamente en Venezuela es inocultable por parte del régimen, a pesar de las acciones que han sido diseñadas en La Habana, Cuba, pero que no van a tener ningún efecto ante la comunidad internacional y los medios de comunicación que así lo han reseñado, especialmente Colombia que recibe a diario a una gran cantidad de venezolanos que van de tránsito hacia Ecuador, Perú, Chile y Argentina, otros que retornan a Colombia, que son colombianos de origen o hijos de colombianos, o venezolanos indocumentados que se aventuran a salir fuera del país y los que están huyendo por tierra hacia Brasil, eso es inocultable.
Por último manifestó que ha sido tal el daño que las políticas del régimen de Nicolás Maduro le han infringido al pueblo que como lo dijo ayer Nikki Haley presidenta del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la situación de Venezuela, “el puente Simón Bolívar es la ruta de escape para personas hambrientas y encarceladas por un dictador” y que “Maduro se convirtió en una amenaza para toda América y como tal lo deben enfrentar los países”, posición que deja claro que el mundo entiende muy bien lo que padecen los venezolanos y que si no hay una rectificación por parte del Estado, la comunidad internacional tendrá que actuar firmemente de manera inmediata.