#LaValeraPositiva Padrinos de Calle en Valera

El 24 de diciembre ofrecieron un almuerzo a niños y adultos de la calle. Gráficas: Cortesía

 

 

Lo que comenzó como una iniciativa familiar de cinco personas, hoy cuenta con 36 voluntarios que tienen como objetivo principal ofrecer alimentos a las personas que rebuscan comida entre la basura, “la situación en el país se agravaba cada día más y esperar hasta diciembre para ayudar era mucho tiempo, decidimos salir a la calle cada quince días y así nació Padrinos de Calle”

 

“Padrinos de Calle” es una organización que nació el 25 de marzo de 2017, como una iniciativa de un grupo familiar de cinco personas, en su mayoría mujeres, residentes de Valera, quienes ante la carestía de la vida y al ver que cada día más personas buscan alimentos entre la basura, resolvieron preparar algunos comida para ofrecerles a las personas en situación de calle.

“Siempre veíamos a personas comiendo de la basura y niños en la calle pidiendo, no podíamos soportar ver eso sin hacer algo para ayudar y decidimos hacer comida para llevárselas a estas personas”, inició Carla Pichardo, coordinadora de la organización; quien además compartió que desde hace varios años acostumbraban realizar labor social cada diciembre, sin constituirse como organización, ni mucho menos esperar ser conocidos.

Pichardo: “a ellos les damos de comer pero a nosotros eso nos nutre en lo personal”.

Pichardo recuerda que para la primera jornada familiar como Padrinos de Calle prepararon 25 platos de comida que se quedaron cortos, en comparación con todas las personas en abandono que se cuentan en la “ciudad de las Siete Colinas”, por lo que se vieron en la necesidad de involucrar a más personas que quisieran colaborar con la loable labor.

“Entre semana hay más niños en la calles, trabajando y pidiendo, los fines de semana se ven más adultos, con el tiempo fuimos descubriendo cuáles son las zonas por donde rondan, algunos ya nos conocen y nos esperan, otros aunque tienen hambre no se atreven a recibir los alimentos porque les da miedo, tienen desconfianza”, relató.

Equipos tricolores

Ancianos en situación de calle cada quince días son atendidos.

Pichardo explicó que lo que nació como una preocupación familiar hoy cuenta con voluntarios distribuidos en cuatro equipos denominados amarillo, azul, rojo y blanco, en honor al tricolor venezolano y las ocho estrellas, los cuales se sortean la atención de las rutas en las que han dividido a la urbe, “incluso nuestro logo tiene esos colores”, acotó. Cada equipo asume la misión de elaborar 25 platos de alimentos como meta mínima para las jornadas.

Junto a Doctor Yaso y otras organizaciones se han involucrado en el trabajo de ayudar a personas en condiciones de vulnerabilidad dentro de algunas instituciones públicas, como los pacientes infantiles oncológicos del Hospital Pedro Emilio Carrillo y los internos del Servicio Administrativo de Protección del Niño, Niña y Adolescente del estado Trujillo (Sapnnaet), además del trabajo de rescate de espacios públicos de la ciudad.

Experiencias que marcan el alma

“Simón es un señor que nos guarda frutas cuando le llevamos comida, al principio nos tenía miedo y se molestó cuando intentamos tomarle una foto, pero ya nos espera y nos ponemos a hablar mientras él come; otros agarran la comida y la vacían en una bolsa donde ya tienen algunas cosas que han recogido de la basura, dicen que para compartirlo con sus familias”, acotó con pesar la declarante.

Pichardo aclaró que ella lleva un registro fotográfico de las jornadas para que las personas que en la actualidad hacen colaboraciones de alimentos vean a través de las redes sociales que su “granito de arena” llega a las manos los más necesitados, “para nosotros lo importante es ayudar más allá de que la gente se entere o no de lo que estamos haciendo”.

La voluntaria resaltó que en medio de la crisis generalizada que atraviesa el país se debe agradecer a Dios por la oportunidad de tener todos los días tres platos de comida en la mesa, mientras que hay personas en la calle que pasan hasta dos días sin probar un bocado, “saber que hay gente que tiene días sin comer, eso sin duda, te arruga el corazón”.

Un plato de comida junto a una mano amiga ofrecen los Padrinos de Calle.

 

Colaboraciones

Las personas que colaboran con la organización las contactas a través del Instagram: @PadrinosDeCalleVA. Los que deseen ser parte de la iniciativa los pueden contactar a través de la misma red social. “A veces tenemos encima la fecha de la jornada y no tenemos nada, pero un día antes siempre aparecen donaciones y otras las hacen los mismos equipos. Este año queremos sumar más voluntarios e involucrarnos más con los beneficiarios a través de otras actividades”, concluyó.

 


Integración

La coordinadora de Padrinos de Calle indicó que el trabajo en 2017 le permitió reconocer que existen otras organizaciones sociales sin fines de lucro en Valera que se dedican a ayudar a los indigentes, por lo que esperan que en 2018 puedan aunar esfuerzos en la labor de tender una mano amiga y además de sumar nuevas actividades que apunten al rescate y desarrollo de la ciudad.


 

Frases

Cuando inicié con mi familia jamás me imaginé que iba a poder sumar tantas personas con el mismo fin; y no se trata de tener en abundancia para poder ayudar, es aprender a compartir lo poco que tenemos, ahí radica la verdadera labor social”

 

Hay personas de las que ayudamos que se quedan mirando al cielo y dicen ‘gracias, gracias’ y eso para nosotros es la mayor recompensa, junto a alguna sonrisa. Ayudamos sin esperar nada a cambio”

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