Las malas compañías

Oscar Arnal

El gobierno se encuentra aislado y muchos de sus personeros sancionados por buena parte de la comunidad internacional. Fuera del Pacto Andino, suspendido por el Mercosur y en retirada de la OEA. Los sueños integracionistas de El Libertador han sido destrozados.

Con la llegada del régimen al poder, la política de las “Buenas Compañías” que se había adoptado a partir de la “República Civil” cambió y el oficialismo comenzó a relacionarse con gobiernos, figuras y organizaciones de dudosa reputación. Se profundizaron lazos con los Castro en Cuba, los Ayatolás en Irán, con Gaddafi, Saddam Husein, Bielorrusia, Hezbolá y Corea del Norte. Empezó a inocularse un sentimiento de odio contra EEUU, desconociéndose como principal socio comercial, primer comprador de nuestro petróleo y vecino geográfico.

También se puso en práctica una estrecha vinculación con potencias lejanas como Rusia y China. Fue un alinearse con todo lo que reta al gigante del norte. Para colmo de males se ha tratado de revivir un marxismo anacrónico y superado. Lo más estrafalario ha sido el lenguaje soez y el accionar de “carrito chocón”. Adicionalmente, las relaciones con organismos económicos multilaterales como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y el BID no pueden estar peor, ahora cuando más los necesitamos.

Urge un gobierno de salvación y unidad nacional. Que vuelva a la promoción de la democracia, y las democracias con gobiernos electivos, pluralistas, alternativos y respetuosos de los derechos humanos. En el mundo hay que contener a los gobiernos autocráticos y ser ejemplo de lo contrario. Necesitamos una Cancillería comprometida con el desarrollo del petróleo y la petroquímica. Que defienda precios justos y mercados confiables, y capte inversiones y avances tecnológicos. Es imperativo diversificar el comercio exterior, las exportaciones y que venga el turismo. Lograr la autonomía como país soberano y sacar a Cuba del manejo de asuntos estratégicos. Se trata de profesionalizar la política exterior y acabar con la ideologización. Los venezolanos como dijo el Papa Francisco en la Pascua nos sentimos extranjeros en nuestra propia tierra.

oscar.arnaln@gmail.com

@OscarArnal

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