Ginebra, 23 feb (EFE).- Las muertes de mujeres durante el parto aumentaron un 17 % en Europa y América del Norte y un 15 % en América Latina y el Caribe entre 2016 y 2020, según un informe publicado hoy por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y otras agencias de la ONU.
A nivel global, el número de fallecimientos descendió un 7 % en el mismo período de tiempo, pasando de 309.000 en 2016 a 287.000 cuatro años después, o lo que es lo mismo, una mujer fallecida cada dos minutos.
En cifras absolutas, África Subsahariana concentra más de dos tercios de estas muertes (202.000), mientras que se registraron 66.000 en Asia central y meridional, 9.400 en Oriente Medio y Magreb, 8.400 en Latinoamérica y el Caribe, 810 en Norteamérica y 590 en Europa (310 en los países del este).
La autora del informe, la epidemióloga británica Jenny Cresswell, advirtió en una rueda de prensa para presentar el informe que los avances en materia de prevención de la mortalidad materna «se han ralentizado».
Respecto al aumento de casos en Europa y Norteamérica, consideró que esta tendencia al alza ya se había iniciado antes de 2016 y la atribuyó a las dificultades de acceso a salas de parto, al elevado coste de la seguridad social y los seguros de salud y a las desigualdades raciales, aunque reconoció que las causas son complejas y diferentes en cada país.
Frente a estas zonas, los mayores descensos se registraron en Australia y Nueva Zelanda (-35 %) y en Asia central y meridional (-16 %).
Cresswell subrayó la situación especialmente vulnerable de las mujeres en África Subsahariana, donde los servicios sanitarios para las parturientas están mucho menos desarrollados y en nueve países de la región la tasa de mortalidad duplicó al promedio mundial.
CAUSAS DE LOS FALLECIMIENTOS
De acuerdo al informe, las principales causas de estas muertes fueron las hemorragias internas, la hipertensión, las infecciones ocurridas durante el embarazo, la práctica de abortos de riesgo y la presencia de enfermedades graves (como el sida o el paludismo).
Además, el director del departamento de la OMS para la maternidad, los recién nacidos, los niños y los adolescentes, Anshu Banerjee, destacó que un tercio de las mujeres embarazadas no reciben la mitad de los controles prenatales recomendados y que 270 millones de ellas no tiene acceso a métodos modernos de planificación familiar.
En este sentido, la organización recalcó la importancia de que se reduzcan los tiempos de espera de las mujeres que van a dar a luz y pidió a los profesionales sanitarios que otorguen cuidados ginecológicos «respetuosos» a sus pacientes.
Para ello, la OMS reclamó más inversiones en este ámbito médico y pidió a los estados que coloquen la salud maternal en el centro de sus esfuerzos para impedir que esta situación se agrave y lograr así que «ninguna mujer muera dando a luz a otro ser vivo».