EFE.-La cámara de resolución de la Comisión de Ética independiente de la FIFA suspendió de por vida al venezolano Rafael Esquivel, ex presidente de la federación de su país y de la Conmebol, al nicaragüense Julio Rocha, ex presidente también de la federación de Nicaragua, y a Richard Lai, antiguo mandatario de la federación de Guam.
La FIFA anunció este martes la resolución de los expedientes abiertos a los tres ex dirigentes, vinculados al conocido como escándalo “FIFA-GATE” que se juzga en Estados Unidos y que reconocieron su culpabilidad durante la instrucción del mismo.
Esquivel se declaró culpable de asociación ilícita, delito informático y blanqueo de capitales, cargos relacionados con los sobornos recibidos a cambio de la concesión de los derechos de televisión y marketing de varios torneos de fútbol de la Conmebol, como la Copa América y la Copa Libertadores.
La FIFA recordó que el pasado diciembre también Julio Rocha, ex oficial de desarrollo de esta, se declaró culpable de un cargo de asociación ilícita y de otro de delito informático, igualmente vinculado a sobornos a cambio de la concesión de los derechos de televisión y marketing de los partidos clasificatorios del Mundial.
Ricard Lai, que formó parte de la Comisión de Auditoría y Conformidad de la FIFA, reconoció a su vez su culpabilidad ante dos cargos de delito informático y otro más por negarse deliberadamente a facilitar datos de cuentas en bancos extranjeros.
Su caso se vincula a sobornos recibidos a cambio de su apoyo en las elecciones presidenciales de la FIFA y a la acumulación de poder e influencia tanto en la AFC como en la FIFA.
La Comisión de Ética ha estimado que los tres violaron el art. 21 (cohecho y corrupción) del Código Ético de la FIFA, por lo que ha resuelto su inhabilitación de por vida para ejercer todo tipo de actividades relacionadas con el fútbol (administrativas, deportivas o de otra índole) tanto en el ámbito nacional como en el internacional.
También les han impuesto las multas correspondientes acordes con la cantidad de los sobornos admitidos, aunque no han precisado la cuantía de las mismas.