La Conaie califica de «auto golpe de Estado» decisión de Lasso de disolver el Parlamento

El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), Leonidas Iza, en una fotografía de archivo. EFE/José Jácome

Quito, 17 may (EFE).- El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), Leonidas Iza, calificó de «cobarde auto golpe de Estado» la decisión del gobernante, Guillermo Lasso, de disolver la Asamblea Nacional por «grave conmoción interna y política».

«Al no contar con los votos necesarios para salvarse de su inminente destitución, Lasso da un cobarde autogolpe de Estado con ayuda de Policía y Fuerzas Armadas, sin apoyo ciudadano, convirtiéndose en una inminente dictadura», escribió en su cuenta de Twitter.

En su red social, la Conaie anotó que «frente a la grave situación política del país y un escenario de dictadura de Guillermo Lasso, llamamos a los pueblos y nacionalidades a mantener la unidad en cada estructura organizativa a nivel nacional».

Y avanzó que se convocará en las próximas horas a un consejo ampliado extraordinario para el análisis y la toma de decisiones colectivas.

La Conaie lideró el año pasado unas manifestaciones, que duraron 18 días y que se tornaron violentas, en demanda de mejores condiciones económicas y que terminaron con la firma de un acta de paz, en la que se establecía la constitución de mesas de diálogo para solucionar los temas puntuales que se reclamaron en las protestas en las calles.

Lasso decretó en medio del juicio político en su contra la denominada «muerte cruzada», que disuelve la Asamblea Nacional (Parlamento), de mayoría opositora, y convoca elecciones generales anticipadas, de modo que gobernará mediante decretos hasta que asuma su sucesor.

En un mensaje a la nación, Lasso anunció esta medida contemplada en la Constitución ecuatoriana de 2008 por «grave conmoción interna y política», después de haber comparecido el martes ante la Asamblea para realizar su alegato de defensa ante la acusación formulada por la oposición por un presunto delito de peculado (malversación).

El mandatario recurrió a la «muerte cruzada» cuando se preveía el segundo día de debate que debía llevarse a cabo en la Cámara para posteriormente votar la moción de censura, en la que se requieren 92 votos para destituir al jefe de Estado, equivalentes a dos tercios del hemiciclo.

 

«GRAVE CRISIS POLÍÍTICA»

«El Ecuador tiene la necesidad de un nuevo pacto político y social que le permita salir de la grave crisis política en la que se encuentra y que lamentablemente, cada día se profundiza», dijo Lasso antes de anunciar la «muerte cruzada».

Anotó que la solución debe poner fin a «una confrontación irracional e inútil» y señaló que no es posible avanzar y enfrentar los profundos desafíos «a los que nos somete la inseguridad y el terrorismo con una Asamblea que tiene como proyecto político la desestabilización del Gobierno, de la democracia y del Estado».

Comentó que en los últimos dos años, «un sector de la política nacional ha intentado deponer al Gobierno democráticamente elegido».

Lasso añadió que el proyecto desestabilizador «subió de nivel con el bloqueo de las iniciativas legislativas presentadas por el Ejecutivo» y «todos los esfuerzos del poder legislativo están enfocados en desestabilizar al Gobierno con un juicio político infundado».

«Promueven un supuesto delito de peculado por omisión que no existe en nuestra legislación con el que quieren asegurar que soy responsable político por no haber actuado frente a un presunto caso de corrupción», dijo sobre la acusación de la oposición.

Para el gobernante, se trata de «un proceso sin pruebas, contradictorio, confuso, ilegal e ilegítimo es el mecanismo para destituir al presidente».

«Los acusadores se han obsesionado por acabar con mi Gobierno impulsados por un sobrehumano rencor, sin embargo, han sido incapaces de encontrar prueba alguna en mi contra porque no hay nada que encontrar, absolutamente nada», subrayó.

 

 

 

 

 

 

Salir de la versión móvil