En el marco de la conmemoración del 23 de enero, Día de la Democracia en Venezuela, Joaquín Aguilar, parlamentario de la legítima Asamblea Nacional y miembro del Frente Agroalimentario para la Seguridad y Defensa, se hizo eco de la “Proclama del Campo Venezolano del 23 de enero de 2021”, que fue construido con el consenso de los distintos gremios que agrupa la instancia constituida por resolución por el Parlamento.
Al respecto el también dirigente de Un Nuevo Tiempo en Trujillo, expresó que el campo venezolano hoy sufre la peor crisis que se conozca en la historia republicana, como producto de la pésima gestión de la “política agroalimentaria” que ejecuta el régimen “revolucionario”.
La constitución nacional establece que la producción de alimentos es fundamental para el desarrollo económico y social de nuestra Nación y que la seguridad alimentaria se debe alcanzar desarrollando y privilegiando la producción agropecuaria interna. Por lo tanto, el Estado Venezolano está en la obligación constitucional, de promover la agricultura sustentable como base del desarrollo rural.
“El régimen, a partir de 1999, implementó decenas de leyes y decretos que convirtieron en letra muerta el mandato constitucional de promover la agricultura sustentable como base del desarrollo de la nación, y comenzó a dictar medidas contrarias a la libertad económica y al respeto a la propiedad, y como era de esperar. Este desacierto lo estamos sufriendo y pagando muy caro todos los venezolanos”, apunto Aguilar.
Indicó además que es una falacia del régimen pretender justificar la destrucción del sector productor de alimentos, con el argumento de las sanciones impuestas, por países preocupados por rescatar la libertad en Venezuela, cuando las sanciones han estado dirigidas a personajes del régimen involucrados en la violación de derechos humanos, hechos de corrupción, terrorismo y narcotráfico, así como a empresas del régimen o vinculadas a éste.
“Si analizamos las cifras de producción, esta falsedad del régimen se cae por su propio peso. A partir de 2008 la producción de casi todos los rubros agrícolas comienza a descender y en 2013 la producción entró en barrena”, acotó el dirigente, quien además reiteró que las causas se basan en la escasez de insumos, de maquinarias, de repuestos y su alto costo dolarizado, las dificultades y obstáculos para conseguir combustible, y el casi inexistente servicio de energía eléctrica.
“Aunado a estas calamidades, padecemos la inseguridad personal en el campo, el abigeato, robos, invasiones y saqueos de las unidades de producción, con el agravante del desconocimiento de la propiedad de las tierras, de las bienhechurías y de las cosechas. Para completar este trágico cuadro, están otros infortunios que sufre el productor, como lo es el cobro de vacunas por bandas organizadas, el cobro de coimas en las alcabalas para permitir el libre tránsito y para la emisión de guías de movilización de semovientes y de cosecha”.
Resaltó que en materia de ciencia y tecnología, Venezuela aún no hemos entrado al siglo XXI, “el régimen ni hace ni deja hacer. Secuestró los centros de investigación, asfixió económicamente a las universidades, a las escuelas técnicas y mediante el control de cambio, por mucho tiempo, practicó el oscurantismo tecnológico. Además, la desinversión en la educación rural, en la extensión agrícola y en el acompañamiento, es evidente. Los jóvenes del campo migran por centenares al no encontrar la educación y la formación, que les permitan proyectar un futuro esperanzador”.
Para concluir el parlamentario manifestó que este 23 de enero de 2021, cuando se conmemora el 63º aniversario del nacimiento de la democracia en Venezuela, “golpeada y desconocida actualmente por el régimen usurpador de Nicolás Maduro”, junto a los productores del campo, reitera su compromiso de lucha hasta reconquistar la libertad de Venezuela que permita recuperar el rumbo del progreso y desarrollo de la nación.
Yoerli Viloria