Yakarta, 14 ene (EFE).- Los equipos de rescate reanudaron este jueves, en medio de condiciones atmosféricas adversas, las búsqueda de una de las cajas negras y de restos de las víctimas del avión con 62 ocupantes que se estrelló en aguas indonesias el pasado sábado sin supervivientes.
La agencia indonesia de búsqueda y rescate, Basarnas, que la víspera tuvo que cancelar las tareas debido al mal tiempo, indicó en un comunicado que las operaciones se están viendo dificultadas por la lluvia y vientos superiores a los 37 kilómetros por hora.
«El tiempo es una preocupación importante para el desarrollo de las operaciones», afirmó el responsable de Basarnas, Bagus Puruhito, quien precisó que los restos del aparato están muy diseminados.
Unos 160 buzos, ayudados por decenas de barcos y helicópteros, participan en la búsqueda a unos 20 metros de profundidad en aguas de las Mil Islas, un archipiélago situado a escasos kilómetros de la capital indonesia.
El avión de la aerolínea indonesia Srivijaya se estrelló hace cinco días en el mar de Java poco después de haber despegado del Aeropuerto Internacional Sukarno-Hatta de Yakarta con destino a Pontianak, capital de Borneo Occidental.
El pasado martes los buzos pudieron rescatar una de las dos cajas negras del avión, la que registra los datos de vuelo como la velocidad y la altura y ahora están centrados en la búsqueda de la otra caja negra, la que graba las conversaciones en la cabina de los pilotos.
Estas grabadoras son esenciales para determinar las causas del accidente.
Entretanto, continúan las tareas de identificar los cuerpos de las víctimas con el análisis de unas 60 bolsas con restos humanos recuperados del lugar del accidente y que se encuentran en un hospital de Yakarta.
Gracias a las muestras de ADN de las familias se han identificado a cuatro ocupantes del aparato: dos miembros de la tripulación de 29 y 38 años y dos pasajeros de 36 y 50 años.
Las autoridades indonesias anunciaron la tarde del sábado que se había perdido el contacto con el aparato a las 14.40 hora local (6.40 GMT), unos trece minutos después del despegue y sin que el Transmisor Localizador de Emergencia (ELT) hubiera emitido aviso alguno.
Según el registro de vuelo, viajaban a bordo del aparato 50 pasajeros, incluidos tres bebés y otros siete menores de edad, y doce tripulantes, todos ellos de nacionalidad indonesia.