A través de una nota de prensa Humberto Araujo, dirigente social y coordinador de Centro de Enlace Parlamentario (Cepar) en el estado Trujillo, indicó que es lamentable que existan personalidades de la oposición en la región tarifados por factores fácticos que responden a “oscuros” intereses y buscan hacerse del poder.
“Es lamentable que de este lado, si, del lado que ha puesto los caídos en protestas, los presos políticos, los inmigrantes, que ha aguantado el dolor y el hambre, estemos conviviendo con personajes que se dedican a manipular y enlodar el acto político, quienes buscan armar por la vía del dinero mal habido un paquete político de bajos intereses, y donde la doble moral y el doble discurso son los signos que los caracterizan”, apuntó.
Para el declarante quien acepta ser tarifado acepta dejar de lado la libertad de pensar y se aleja de los principios rectos a cambio de dinero, “comprar lealtades no solo involucra al corrupto sino también a quien acepta. La mordida, en política, es la mayor de las conspiraciones contra la moral y aunque es verdad que los corruptos tienen militantes, nunca más que la honestidad”.
Reiteró que el dinero es el vínculo que liga a muchos dirigentes políticos con la vida de otros a quienes les exigen sumisión y entrega total, “nos toca defendernos de la implementación de una práctica que quiere demostrar que la fuerza del poder es tan grande como lo sea la fuerza del dinero”.
Déficit ético y moral
“El déficit ético y moral parece que no solo se encuentra de un lado, hay quienes desde la oposición comprometen los ideales de cambio y transformación con prácticas dudosas que afectan los propósitos de una nueva Venezuela. Hay un quiebre moral cuando por ejemplo se vende un discurso anticorrupción pero se usa el cargo que ostenta para el beneficio personal a través del negocio del chantaje y la extorsión”, resaltó.
Líderes coherentes y legítimos
Araujo destacó que si hay algo que el país necesita en este momento son líderes coherentes y legítimos, “hoy más que nuca debemos estar atentos al nivel de engaño que hay en la región, sus beneficios y beneficiados, más aún cuando el instrumento para tal fin es el dinero. Voltaire decía que quienes creen que el dinero lo hace todo, terminan haciendo todo por el dinero”.