Los funcionarios de seguridad no se escapan de la crisis que atraviesa el país, para este año 2.018, muchos militares ya tienen entre planes emigrar del país. Tal como lo han hecho los profesores, médicos y demás profesionales que no sobrevivían con el precario sueldo que era depositado a sus cuentas bancarias.
Fuentes ligadas a los organismos de seguridad los cuales pidieron no ser identificadas, aseguraron a Diario de Los Andes que de diez, tres están tramitando lo baja de la institución, dos tienen pensado tramitarla este año, y por lo menos dos más de cada 10 lo están pensando.
Por lo general lo que están solicitando la baja son funcionarios que tiene pocos años de graduados, ya que aún no tienen la opción de salir pensionados. “Por ejemplo yo no la voy a tramitar porque estoy a punto de quedar pensionado, luego de eso si pienso irme del país con mi familia, nosotros estamos aguantando hambre en los comandos y nos toca que gastar el sueldo en la comida de acá” dijo la fuente.
Asimismo comentó el militar que probablemente inicie con trámites complicados para impedir que les otorguen la baja o prohíban las solicitudes de baja.
Cabe mencionar que los funcionarios militares han manifestado incertidumbre, ya que al no lograr la baja por las vías regulares tomaran la decisión de no regresar a sus trabajos y les podrían librar órdenes de captura por desertores.
¿Qué consecuencias traería esto a las instituciones de seguridad?
El funcionario respondió “En vista del poco personal que tendrían (en el hipotético caso), estos no tendrán capacidad para poder defender al gobierno de las multitudes reclamando libertades, alimentos y medicinas, lo que le traería consecuencias fatales al gobierno para sostenerse en el poder. Los generales sin tropa no serían nadie” explicó.
De hecho se ha podido evidenciar que en algunas unidades militares estarían dictando cursos exprés, incluso le asignan como responsabilidad de los funcionarios graduados captar cierta cantidad de individuos para que ingresen a los cursos.