Josir Cegarra / Pasante
La carrera 3 que conduce al Puente Internacional Francisco de Paula Santander, que conecta a las ciudades de Cúcuta, Colombia, y Ureña, Venezuela, presenta un estado de deterioro. Desde hace meses, decenas de baches de diversos tamaños han proliferado en esta vía principal, especialmente metros antes del puente, lo que representa un peligro para los conductores, quienes deben esquivar los huecos a riesgo de sufrir accidentes o daños en sus vehículos.
Margarita Oviedo, habitante del municipio, expresó su preocupación por el estado de la vía. «No se toma en cuenta que esta es la primera impresión del país al ser una entrada internacional, se deteriora la imagen turística que queremos fortalecer en la frontera, estamos llenos de cráteres, Ureña no tiene dolientes». Esta opinión es compartida por residentes de la zona, quienes ven en el deterioro de la vía un reflejo del abandono de los gobernantes.
Todo esto ante la indiferencia de las autoridades regionales y municipales. Hace siete meses repararon un cráter que se encontraba en las inmediaciones del puente, pero omitieron de que, a pocos metros de donde se encontraban trabajando, existían huecos de diversos tipos y tamaños.
Por otra parte, los conductores de vehículos públicos y privados hacen hincapié en el desgaste de cauchos y deterioro del tren delantero ante la proliferación de baches que, con el pasar de los días, se incrementan, lo que se convierte en pérdidas económicas significativas para los transportistas, quienes deben destinar una parte de sus ingresos a reparaciones de los vehículos.
Yovany Roa, conductor de transporte pesado, señaló que «el estado actual de las vías representa un riesgo para la seguridad vial. En cualquier momento podemos sufrir la explosión de un caucho y vamos con carga pesada. Urge que se realicen las reparaciones necesarias para garantizar el buen funcionamiento de este importante paso fronterizo».
Ante esta situación, los ciudadanos del municipio solicitan a las autoridades que se destinen los recursos necesarios para la rehabilitación de las vías. Asimismo, proponen la implementación de un plan de mantenimiento preventivo para evitar que la situación se agrave en el futuro.