Los pueblos andinos preparan sus mejores galas para recibir y ofrendar al santo negro, San Benito de Palermo.
Benito Manasseri, llamado San Benito de Palermo y también conocido como San Benito el Africano, el Moro o el Negro (San Fratello, c. 1526 – Palermo, 1589) fue un religioso italiano, canonizado tras un largo proceso en 1807.
Poblaciones del estado Mérida, como Timotes, abren la fiesta el 29 de diciembre, la cual que se extiende hasta enero en Chachopo, La Venta, Mucuchíes, Apartaderos. Diversas comparsas de giros vestidos de blanco con cintas multicolores, los indios, los negros, los marrones, los rojos, se reúnen en una velada religiosa y cultural donde, con actos litúrgicos, procesión por las principales calles y bailes rinden honor al milagroso santo.
Lo que más destaca es la participación de cuatro grupos distintos, cada uno con su vestuario diferente. Los «vasallos» o «giros» de blanco con cintas de seda pegadas a sus camisas y usan una corona decorada con guirnaldas, los «negros» llevan sus caras pintadas de negro, los «marrones» van de marrón con cintas rojas y los «indios» decoran sus caras y brazos con «diseños de guerra», algunos con tocados con plumas. Todos llevan una maraca en la mano.
Ofrendas
Las celebraciones se realizan en agradecimiento a las cosechas del año, los giros caminan en procesión encabezados por la imagen de San Benito, adornada con flores y lazos.
Durante el baile de las cintas estas van tejiéndose y destejiéndose en el palo, al ritmo de los tambores, también ejecutan el violín, el cuatro y las maracas. Esta danza es de raíces indígenas, y dura varias horas hasta que se presenta la última cofradía presente.
En el páramo los danzantes se pintan las caras, asisten cofradías de Giros, de Piñango, Tabay, Cachopo, La Venta, San Rafael de Mucuchíes, Pueblo Llano y otros pueblos vecinos como La Puerta y la Mesa de Esnujaque del estado Trujillo.
Origen
La celebración en las calles se inició a finales de la segunda década del siglo pasado. Según relato de Jorge Luis Parra, quien fue presidente de la Sociedad de San Benito de Timotes, y Luis Franco y Darío Franco, giros pioneros, era un pequeño grupo de personas devotas a San Benito los que bailaban, se vestían de giros, ofrecían una misa y quemaban pólvora. Poco a poco se organizaron hasta conformar comparsas como ofrenda.
Fue en 1940 cuando se creó la Sociedad de San Benito, fundada entre otros por Toribio Gutiérrez, Julio Araujo, Guillermo Franco, Teodoro Franco, Hilario Santiago, Esteban Gutiérrez, Narciso Picón, Juan Lobo, Benito Franco y Epifanio Linares. Desde entonces, los miembros de esta sociedad se encargan de organizar el homenaje cada año.
En esta manifestación folklórica se funden elementos de tres continentes: lo indígena, africano y español.
Fe y devoción
Al amanecer del día 29, se oye una andanada de fuegos artificiales, que anuncia que la fiesta está por comenzar. Entre las comparsas figuran las de Negro de Palermo, Marrones de Piedra Gorda, Juan Pablo Segundo, Hugo Ramón Becerra, Santa Eduvigis, Santa Lucía, Giros Pequeños, Romería de San Benito, Mocho Silverio, Guillermo Franco, Don Cristóbal y Diana Alarcón, Las Indias de Los Llanitos.
Tras la celebración de la misa, sacan la bendita imagen que encabeza la procesión y cada una de las cofradías toma un lugar en la larga fila para rendir tributo al santo con su baile. Numerosos devotos toman las calles para ver pasar la procesión, lo cual llena de un singular colorido el pueblo volcado en su fe cristiana.
Sanbeniteros del estado Trujillo
El festejo a San Benito con las cintas multicolores, los giros, los negros, los rojos e indios, también se realiza en el estado Trujillo, en La Puerta y la Mesa de Esnujaque, municipio Urdaneta. Los Giros de San Benito de Palermo, tienen en La Mesa de Esnujaque una arraigada tradición de generaciones familiares.
En los demás municipios trujillanos Sabana de Mendoza, Motatán, Pampán, Flor de Patria, La Ciénega de Valera, Betijoque, los devotos realizan misa, procesión y baile de tambores con los chimbangueles, a los cuales asisten numerosos devotos para agradecer o solicitar un favor o milagro al santo negro. También en algunos lugares del estado Zulia realizan festejos y bailes en su honor.
Uno de los más esperados es el celebrado el 25 y 26 de diciembre en Betijoque. Vasallos y chimbangueles de todo el estado Trujillo asisten para su fiesta.
Reliquias Sagradas
El 10 de marzo de 2001, la Sociedad de San Benito recibió una reliquia del santo negro, traída por el arzobispo Baltazar Porras y el 29 de diciembre del mismo año, recibió otra de manos del padre Fernando Trupia, quien es el custodio de los restos de San Benito en Palermo. Estas sagradas reliquias son un trozo de piel y una parte del costado, extraídos directamente del cuerpo de este santo negro. Se guardan y protegen en la capilla de San Benito, ubicada en la parte alta de Timotes, frente a la Plaza Miranda.
Bibliografía: Recopilación tomada de Francisco Rivero Mendoza y Ember Martínez