La población de Lobatera y los miembros de la Guardia Nacional de Bolivariana que hacen vida en el Táchira celebraron su fiesta patronal en honor a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, el pasado 18 de noviembre, con la Eucaristía presidida por monseñor Mario Moronta en el templo parroquial.
La celebración comenzó con la procesión de la imagen venerada de la Virgen de Chiquinquirá por las calles de la comunidad, con el acompañamiento de los fieles y efectivos militares.
“La Virgen María nos enseña a estar en el camino de Dios”, expresó el Obispo de San Cristóbal en su homilía. Recordando que, “Ella se metió en la historia de la humanidad siendo Madre de Dios, por lo cual también se Dios introduce en la historia para salvarnos por su Hijo”.
Exhortó el Obispo a recocer la misión de la Virgen y su herencia, “pues ella forma parte de una tarea muy importante en nuestra historia, y cuando una comunidad una institución como la Guardia Nacional Bolivariana le honra, nos da una herencia viva, que es Jesucristo”.
Finalmente invitó a los devotos de la Virgen de Chiquinquirá a “dejar habitar en nuestro corazón el amor de la Madre de Dios”.
Al concluir la celebración los miembros del Consejo Pastoral Parroquial de Lobatera, hicieron públicamente la solicitud al Obispo diocesano de elevar el templo de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá a Santuario, para favorecer la atención pastoral a los devotos de la venerada imagen cuatricentenaria. (Prensa DiocesisSC)