DLA EVOLUCIONÓ EL PERIODISMO DEPORTIVO. El deporte en Diario de Los Andes fue desde el primer momento muchísimo más que una simple noticia, por eso que quisimos citar lo dicho por Graterol Vargas. Desde su nacimiento DLA describía diariamente la hazaña deportiva. Siempre ha sido prioridad y una de sus fortalezas
Elvins Humberto González
ESPECIALES DLA
Con la aparición en la escena periodística de Diario de Los Andes se produce un gran cambio en el tratamiento de la noticia deportiva, pues ya se había habituado aquí, como rutina, que las crónicas se limitaban en forma cansona a reseñar los encuentros entre dos equipos; y ello obedecía a la ausencia de una mentalidad diferente en la dirección de los medios escritos, donde no existía una clara concepción de la importancia de las actividades del músculo y todo se cumplía como por salir del paso, así nos lo ha dicho en reiteradas oportunidades Francisco Graterol Vargas, fundador de DLA y el referente más importante del periodismo deportivo trujillano.
Pero se logró con Diario de los Andes, encontrar algo distinto, como se pudo apreciar cuando el rotativo envío al equipo reporteril a cubrir la Vuelta Venezuela de 1978 su primer gran evento, todo sin escatimar esfuerzos ni gastos, con apenas tres semanas en circulación y el resultado fue exitoso, la FVC los distinguió como el mejor medio informativo de la Vuelta. Lo mismo ocurrió con la Vuelta al Táchira, con el Clásico de los Trabajadores, la Vuelta a Portuguesa y eventos como el Occidental de Boxeo, el Nacional de Béisbol «A», cuando los lectores estuvieron informados plenamente de todo cuanto ocurría la noche anterior. En alguna ocasión, señala Graterol Vargas,”un juego entre Barinas y Zulia concluyó a las dos de la mañana y a las seis, cuatro horas después, los lectores tenían las noticias del suceso con la tinta fresca, recién salido de la rotativa”.
Prioridad y fortaleza
El deporte en Diario de Los Andes fue desde el primer momento muchísimo más que una simple noticia, por eso que quisimos citar lo dicho por Graterol Vargas. Desde su nacimiento DLA describía diariamente la hazaña deportiva. Siempre ha sido prioridad y una de sus fortalezas.
Con el tiempo se fueron creando otros medios de divulgación, sin que sus resultados se acerquen ni cercanamente a las páginas de SuperDeportes de hoy día.
Diario de Los Andes revolucionó el lenguaje periodístico y no sólo el deportivo, por ello con toda razón, se ha sembrado en el corazón de los trujillanos, gracias al respeto que tiene a su gente, a la cual le entrega con un lenguaje adecuado con lo que reclama el lector.
Es que con la inmediatez con lo que se informa a diario sobre cualquier acontecimiento, ha provocado que no se valore, en esencia, la trascendencia de una noticia. No son pocos los periodistas que piensan que se escribe sólo para el lector de mañana o del momento por lo inmediato de las redes sociales, olvidando que la palabra impresa es para toda la vida, no en balde existen hemerotecas cuyo objetivo es, precisamente, la de preservar las publicaciones periódicas. En consecuencia, el redactor deportivo debe tener conciencia que sus escritos trascenderán el límite de su propia vida y unirla para siempre a la memoria de nuestra región. Se escribe para un mañana eterno.
El valor histórico
Los medios de comunicación, en este caso Diario de Los Andes son fuentes de extraordinario valor histórico, pues en sus hojas quedan registrados todos aquellos sucesos que, sin duda alguna, constituyen información de rico valor para la reconstrucción de cualquier tema que sea historiable. Y el deporte es uno de ellos, tanto por el arraigo que tiene en la sociedad, como por el impacto que provocan en esta las noticias sobre cualquier evento. Por fortuna el DLA ha sabido ubicar con exacta dimensión a la crónica deportiva, ya que la historia ha estado reducida fundamentalmente a factores políticos – militares propios de la historiografía tradicional venezolana.
De allí la imperiosa necesidad de considerar la historia bajo un concepto global, no excluyente, para que en ella se incorporen elementos de igual trascendencia, tales como los sociales, científicos, culturales y sobre todo deportivos, tema este último desechado totalmente en los estudios de los procesos históricos, a pesar de tener una enorme relevancia en la vida cotidiana de la población.
El lenguaje periodístico
Algunos podrían suponer que la expresión de jugador, al escuchar la narración del gol que consiguió, era apenas el resultado de su emoción por el triunfo que los consagraba como el mejor equipo en ese momento.
Pero la verdad es otra más compleja y requiere de un análisis profundo para entenderla. El lenguaje se ha constituido en parte sustancial del espectáculo deportivo y ya no es posible la existencia del primero sin el apoyo de la palabra, bien escrita o narrada.
El crecimiento del deporte como fenómeno de masas alcanza alturas inimaginables, con una audiencia, bien mediante los medios de comunicación o directamente en los escenarios donde se realiza el evento deportivo, que ya no causa el menor asombro que eventos deportivas superen fácilmente a los mayores acontecimientos que realice el hombre, en cualquier área, incluyendo, los viajes interplanetarios, las guerras o los terremotos.
La fuerza que adquirieron los medios comunicacionales, puede situarse como una de las grandes revoluciones que ha conseguido la humanidad.
Pero no siempre fue así, y en ese sentido cobra fuerza la utilización del lenguaje, su adaptación a un campo tan específico.
Salto hacia delante
Generalmente se ha apreciado que el éxito de las páginas deportivas con SuperDeportes se debe a que se ocupa de la materia deportiva, que solamente reseña victorias y récord, por lo que sería demasiado fácil reseñar cada encuentro, con una audiencia cautiva.
Nada más lejos de la verdad. En primer término el periodista deportivo tiene no únicamente que dominar profundamente el tema que reseña, sino que al mismo tiempo lo describe para un público generalmente enterado, al que debe emocionar, tanto por la verdad de lo descrito, como mediante el lenguaje que utiliza para atraparlo. Así lo hemos aprendido de un conocedor excepcional como Francisco Graterol Vargas, quien pregona este último párrafo a los cuatro vientos, y razón tiene de sobra.
DLA juega a ganador
Diario de Los Andes ha jugado y sigue jugando un papel de primer orden en la divulgación de hechos relacionados con el quehacer de nuestra sociedad. Con la vida misma, en este caso la de los trujillanos. Es en la prensa, pues, donde el concepto de historia global ha tenido cabida. No sería exagerado afirmar que gran parte de nuestra historia contemporánea se encuentra dispersa en las amarillentas páginas de periódicos, revistas, folletos y otros. Y la deportiva es una de ellas.