Javier Abreu voló con sus letras en diciembre
El día miércoles 27 de diciembre falleció el poeta y fotógrafo, el amigo, el padre, el alma alegre de todos los eventos culturales del estado, Javier Abreu, y qué mejor manera de despedirlo, que sus amigos lo hagan. Poesía, emociones y fotografías para el maestro.
FOTO1:
Norman Prieto:
“Este trabajo de Javier Abreu fue realizado en Trujillo en julio de 2016. Trabajamos con modelos trujillanas tres días intensivos. Primero, cada uno las fotografió, luego Javier intervino las fotografías de Norman y Norman intervino las de Javier. Aunque las fotografías son digitales, las intervenciones son analógicas”.
Mariela Balza:
“No se trata de hacer el cliché de erigir al difunto como el hombre perfecto que no fue, a Javier no le gustaban los clichés, así como tampoco le gustaba la religión, si hasta parecía una broma del día de los inocentes que se estuviese rezando por él. Javier Abreu, odiado por unos, amado por otros tantos, irreverente a más no poder, su falta de hipocresía o su excesiva sinceridad causaba incomodidad”.
Gregorio Riveros:
No todo el tiempo es así.
No todo el tiempo es así, brumoso
como una yerba espigada de afiladas puntas
húmedas de lágrimas. No todo el tiempo es así.
Con la belleza profunda de los espejismos del mar.
Con la memoria que bambolea hasta morder el piso
con livianas vísceras vacías que obligan
saetas, y flores negras.
Pedro Torres Pacheco:
Busco a tientas
el latir de la vida
el espasmo largo
busco a tientas
tu asombro
en la soledad de mi sábana
vacío mi copa
vuelvo al reborde oscuro
transgredo las voces
del nocturno bullicio
salto y lleno de nuevo la copa, la copa
El poeta, cual valiente gladiador armado con la nave su verbo, se aventuró a su noche estrellada a buscar su estrella.
Daniela Lozada Portillo:
“Un poeta acaba de irse pero su poesía apenas llega a este mundo. Buen viaje mi amadísimo loco y rockanrolero Javier Abreu. Descansa en paz.”
Javier Abreu, padre, hermano y poeta
Venimos de la botella y hacia la botella vamos
Al norte de un cocuy poblado de sures
marchó el lobo
con un cielo a cuarenta y cinco grados de alegrías
que comparten cándidos tahúres del verbo
marchó el verso hecho barbas de vejete
pintadas con nubes preñadas
bajo los pinceles de Miguel
y los claroscuros de Junior
no lo abandonaron sus fantasmas
esos que página tras página
escribieron los días hasta su encuentro
ahora entender más próxima la muerte
es saber que no hay hojas de hierba
ni alcaloides proscritos o meditación en verona
que me hagan vencedor del dolor
es el crisol de regaños y borracheras
que dejan ciertos resabios de poeta
es el cigarro a bocanadas rítmicas
en el solo ondulante de un rock and roll
mientras el perro aúlla despedidas de borracho
emprendió viaje papá monstruo
a mirarnos y a echarse un palo con cuartín y Juan Carogo
y digo un palo por cuartín
emprendió viaje papá monstruo
a besarle los poemas a su princesa de ébano
ella lo esperaba cada verso detrás de la puerta
cada trago y él profesando el nadaísmo
cristalizando los días
mostrándonos el mundo a través del litro de cocuy
venimos de la botella y hacia la botella vamos
como ríos incesantes de aguardiente
se marchó papá monstruo
se marchó en la guitarra de un blues sereno
papá monstruo.
“Javier Abreu en la distancia tan fría y tan amarga siento mucho tu partida mi viejo amigo, viejo gracias por todas las lecciones, por tus ocurrencias, tu manera divertida de vivir la vida, por todos tu poemas y su mensaje detrás de cada poesía”.
Rafael García:
“Siento demasiado dolor, nunca más te volveré a ver Papá monstruo, y nunca, nunca más volveremos a compartir el cocuy, la rabia, la palabra. Y yo tan lejos de tanta gente que quiero”.