El embajador de Venezuela en los Estados Unidos, Carlos Vecchio, nombrado por Juan Guaidó, afirmó que la detención arbitraria de Roberto Marrero, jefe de despacho del proclamado presidente interino Juan Guaidó, es “un secuestro y un ataque directo al presidente interino y su equipo cercano, con una misión muy clara: amenazar, amedrentar e intimidar para intentar que perdamos el foco, que es la salida de la dictadura usurpadora lo más pronto posible”.
Vecchio aclaró que, contrario a la intención del usurpador Maduro, este secuestro reafirma el compromiso con la Operación Libertad que ha planteado Guaidó, “nuestro mensaje es no perder el foco, que nada esto detenga el espíritu de cambio que está sembrado en nuestro pueblo. Sabíamos que no iba a ser fácil porque estamos enfrentando una dictadura criminal, una mafia que tiene tomada Miraflores, pero al final del día la libertad se va a imponer por el coraje que ha mostrado el pueblo de Venezuela y el apoyo que ha mostrado la comunidad internacional a nuestra lucha”.
Vecchio alertó a la comunidad internacional sobre esta nueva violación de derechos humanos, que ocurre un día después que la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas, Michelle Bachelet, denunció en su informe anual los graves hechos que ejecuta el régimen de Maduro en Venezuela.