• Trujillo
  • Táchira
  • Mérida
  • Andes Legales
  • Revista Andina
jueves, 22 mayo 2025
Diario de Los Andes
  • Inicio
  • Actualidad
    • Entretenimiento
    • Bienestar
  • Deportes
  • Economía
  • Mundo
  • Opinión
    • Sentido de Historia
  • Política
  • Sucesos
  • Trujillo
    • Boconó
  • Táchira
  • Mérida
  • Revista Andina
No Resultados
Ver todos los resultados
  • Inicio
  • Actualidad
    • Entretenimiento
    • Bienestar
  • Deportes
  • Economía
  • Mundo
  • Opinión
    • Sentido de Historia
  • Política
  • Sucesos
  • Trujillo
    • Boconó
  • Táchira
  • Mérida
  • Revista Andina
No Resultados
Ver todos los resultados
Diario de Los Andes

No Resultados
Ver todos los resultados
Inicio Opinión

El Partido Trump

por Redacción Web
14/11/2018
Reading Time: 4 mins read
Compartir en FacebookCompartir en TwitterComparteComparte

Lea también

Armonía y “buen vivir”  | Por: Miguel Ángel Malavia

Un papa misionero | Por: Miguel Ángel Malavia

21/05/2025
¿Cómo te conectas con el dinero?  ¡De la emoción a la acción!   |  Por: José Luis Colmenares Carías

Del Complejo del Dinero al Trastorno Financiero | Por: José Luis Colmenares Carías

21/05/2025
Foro CeraWeek y la privatización de PDVSA  |  Por: Rafael Quiroz Serrano

HACE 150 AÑOS DE LA APARICIÓN DEL PETRÓLEO EN VENEZELA | Por: Rafael Quiroz Serrano

20/05/2025
El Mundo Actual:  El Poder de la Alquimia Sanadora Interior el regreso del indígena que todos llevamos por dentro en el corazón de todos !

De Nicea a León XIV, de Spinoza a Lutero y Einstein | Por: Frank Bracho

20/05/2025

Por:  Alfredo Toro Hardy

Las recientes elecciones legislativas estadounidenses demostraron hasta qué punto Trump controla al Partido Republicano. O, puesto en otros términos, cómo controla al voto que lo alimenta y por intermedio de éste al partido mismo. Fue gracias a su involucramiento activo en la campaña que múltiples candidatos de esa tolda lograron conservar sus curules en el Senado o acceder él. Ello incluyó a su mayor rival de hace dos años por la candidatura presidencial republicana, Ted Cruz, quien debió aceptar el trago amargo de su apoyo para alcanzar una reñida reelección. Gracias a esta participación activa pudo contenerse a la marea demócrata donde realmente importaba: el Senado.

Ello confirma lo que venían señalando los analistas. Es decir, cómo Trump había logrado apropiarse del partido, transformándolo en una extensión de su personalidad y planteamientos. Tal como refería The Economist el 21 de abril de 2018: “Todos los presidentes republicanos y demócratas intentan reconfigurar al partido a su imagen y semejanza. En ello, Donald Trump ha sido más exitoso que la mayoría. Desde el comienzo, los votantes se vieron hipnotizados por él, abrazándolo mucho más fervientemente de lo que las autoridades del partido quisieron reconocer. Luego de 15 meses en el poder, él se ha apropiado totalmente del partido”.

Thomas L. Friedman llegaba más lejos: “El Partido Republicano ha cambiado en todo menos en el nombre, pasando de la noche a la mañana de ser internacionalista, pro libre comercio y anti déficit fiscal, para transformarse en un partido proteccionista, antiinmigrantes y abierto a los déficit fiscales; todo ello para adaptarse a los instintos de Donald Trump y de su base. Como bien señalaba el antiguo presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner: ‘Ya no existe un Partido Republicano. Lo que existe es un partido Trump’” (Why Are So Many Political Parties Blowing Up?, The New York Times, June 26, 2018). Todo lo anterior quedaba confirmado por una encuesta del New York Times del 24 de julio de 2018, según la cual Trump disfrutaba del apoyo del 90 por ciento del partido.

¿Cómo una figura que se introdujo como un cuerpo extraño en las elecciones primarias por la candidatura presidencial del Partido Republicano, hace pocos años, logró apropiarse del partido de manera tan completa?

Trump supo aprovecharse de la inseguridad y los temores de una gran cantidad de estadounidenses, adaptando su mensaje a la realidad de aquéllos. Sin embargo, eso por sí solo no hubiese bastado si la mesa no hubiese estado ya servida al interior del Partido Republicano mismo. Quien se ocupó de hacerlo fue una plutocracia que, a través de sus gigantescos donativos electorales, lo había doblegado a sus intereses. Jane Mayer, una de las periodistas investigativas de mayor prestigio en Estados Unidos, publicó en 2016 un libro de la mayor importancia para comprender la fuerza del dinero privado detrás del Partido Republicano. En él se explicaba cómo los hermanos Charles y David Koch, dueños de la sexta y la séptima fortunas más grandes del mundo, crearon en la más absoluta opacidad una suerte de “banco político” dedicado al financiamiento y control de dicho partido y de las ideas que lo sustentaban. Los integrantes de dicho grupo incluían a dieciocho billonarios y a un extenso número de multimillonarios con una fortuna combinada superior a los 214 mil millones de dólares. Dicha plutocracia propiciaba un gobierno limitado, una reducción drástica de impuestos, mínimos servicios sociales para las necesitadas y mínimas supervisiones para las actividades económicas, particularmente en materia de medio ambiente (Dark Money, New York).

Estos plutócratas no sólo perseguían que el proceso político se amoldase a sus intereses patrimoniales, sino que para lograrlo recurrían a una movilización política de rasgos par-ticulares. En otras palabras, junto a la agenda patrimonial existía un método de acción política. Martin Wolf describía así la esencia del modelo: “…El ‘obstruccionismo salvaje’, la demonización política de las instituciones, el coqueteo con la intolerancia y el racismo… ¿Por qué ha ocurrido esto? La respuesta es que esta es la manera en la que una poderosa casta de donantes, abocada a cortar impuestos y a achicar al Estado, logra ganarse a los soldados de a pie y a los votantes que necesita. Se trata, por tanto, de un ‘pluto-populismo’: un matrimonio de la plutocracia con el populismo de derecha” (“Donald Trump embodies how great republics meet their end”, Financial Times, March 1, 2016).

Donald Trump aterrizó como un outsider en medio de este estructurado universo. No obstante, nadie como él supo aprovecharse con tanta maestría del terreno labrado en materia de demonización política de las instituciones y del coqueteo con la intolerancia y el racismo. Bastó con que voltease el fuego político creado por el establishment del partido en contra de éste, para que se apoderase de sus bases y por intermedio de éstas del partido mismo.

Tags: Alfredo Toro HardyOpinión
Siguiente
Creada base de datos única para inmigrantes

Creada base de datos única para inmigrantes

Publicidad

Última hora

Juramentados 10 nuevos integrantes de la Academia de Historia del Táchira

Suspenden las clases en todo el país por las elecciones del 25 de mayo

FIFA abrirá periodo extraordinario inscripción de fichajes para el Mundial de Clubes 2025

Trujillo | Alcalde de Sucre presenta este jueves 22 informe de gestión correspondiente al año 2024

El impuesto a las remesas de EE.UU. angustia hasta a 40 millones de migrantes y sus familias

Publicidad

Diario de Los Andes

Ediciones

  • Trujillo
  • Táchira
  • Mérida
  • Andes Legales
  • Revista Andina

Síguenos

Welcome Back!

Login to your account below

Forgotten Password?

Retrieve your password

Please enter your username or email address to reset your password.

Log In
No Resultados
Ver todos los resultados
  • Trujillo
  • Boconó
  • Táchira
  • Mérida
  • Inicio
  • Actualidad
  • Entretenimiento
  • Bienestar
  • Política
  • Deportes
  • Sucesos
  • Mundo
  • Opinión
  • Sentido de historia
  • Economía
  • Revista Andina
  • Andes Legales