Berlín, 27 ago (EFE).- Un activista del grupo ecologista ‘Letzte Generation’ (Última Generación), conocido por su estrategia de cortar carreteras, ha sido condenado este martes a un año y diez meses de cárcel, la pena más alta impuesta hasta la fecha por bloquear calles, según el propio colectivo.
El activista, Winfried Lorenz, de 65 años, fue condenado por varias protestas en las que participó en 2022 y 2023 y tendrá que ingresar en prisión, a pesar de no contar con antecedentes penales.
La sentencia fue impuesta por el Tribunal de Distrito de Tiergarten en Berlín, pero, de acuerdo con el grupo ecologista, hace solo unas semanas otra corte absolvió a Lorenz del mismo delito, cometido en otro lugar.
«Aquí se demuestra de nuevo que la justicia no sabe qué hacer con nuestras protestas. El Gobierno se niega a cumplir con su responsabilidad y traslada el conflicto a instituciones que se ven sobrepasadas y llegan a sentencias completamente distintas», declaró la portavoz de ‘Letzte Generation’, Lina Johnsen.
«Nos encontramos ante la mayor crisis de la humanidad hasta la fecha, que empeora día a día. No hay nada más sensato que protestar contra una política que nos impulsa a nosotros, a nuestros hijos, hacia la catástrofe climática», afirmó el propio Lorenz, según un comunicado.
Los activistas de este grupo, conocidos popularmente en Alemania como ‘Klimakleber’ o pegadores climáticos, son famosos por su polémica estrategia de adherirse al asfalto para cortar el tráfico con el objetivo de llamar la atención sobre el cambio climático.