Carlos Eduardo Graterol Rosales es un joven boconés que como estudiante de la carrera de Arquitectura en la Universidad de Anáhuac, México, el 2017 recibió un reconocimiento a la excelencia académica y, en su visita a Boconó, quiso compartir su historia de superación y motivar a los jóvenes que ahora emigran del país no a estudiar sino a trabajar para ayudar a sus familias.
Carlos es hijo de Loyola Rosales profesora de la Universidad Central de Venezuela (UCV) y el ingeniero civil valerano, Eduardo Graterol. Desde niño vivió en Caracas y estudió en la Salle.
En el 2014 tuvo la primera oportunidad a través de la organizaciónAmerican Field Service (AFS) que ofrece experiencias de aprendizaje intercultural a través de programas de estudio y voluntariado al extranjero; aplicó para Artes en Suecia y luego de un año y tras ingresar a la UCV obtuvo otra beca para estudiar Arquitectura en México.
“El rendimiento académico fue indispensable para lograr aplicar a una beca al 100%, pero también tuve que buscar por Internet todas las posibilidades, que sí se encuentran todavía en Venezuela”. Resaltó hay muchos venezolanos en México, es decir, vieron el potencial de los jóvenes criollos y así se destacan en ingeniería, medicina y otras carreras.
Graterol aspira culminar sus estudios, emprender algunos negocios y regresar a Venezuela, “si quieres, puedes, de hecho es necesario buscar las oportunidades de estudio que sí las hay fuera del país y rendir en bachillerato; de resto lo más difícil será estar lejos de la familia”, concluyó.