Este ilustre personaje de brillante inteligencia, cuyos dotes lo hacen merecedor de un espacio en la historia de Trujillo, especialmente en el mundo educativo y cultural de nuestro lar. Según Pedro A. de Santiago fue descendiente de Altuve, Gaviria y Cerrada (familia de guáramo), natural de San Lázaro y de clase media-baja; nacido el 24 de febrero de 1870.
Se caracterizó por ser un hombre de gran disciplina y apegado al estudio, lo cual lo transformó en uno de los alumnos más destacados de su generación. Sus primeros pasos educativos los tomó del ilustre sacerdote Juan Francisco Rosario (su pariente), quien le enseña gramática, lectura e interpretación, retórica y latín. Se graduó bajo la rectoría del futuro presidente de la República Dr. Victorino Márquez Bustillos, quien era el rector del ilustre Colegio de Primera Categoría de Trujillo. Entre sus compañeros de estudio estaban: Fabricio Gabaldón (futuro médico), Américo Briceño Valero (agrimensor y docente), Amílcar Fonseca (abogado), Inocente Jesús Quevedo (abogado, escritor, Presidente de Trujillo y padre del Dr. Numa Quevedo, quien también sería presidente de Trujillo para 1942) y Rafael María Quevedo (hombre de letras y docente).
Una vez terminado su bachillerato viaja a Caracas y Mérida para continuar sus estudios, pero por problemas económicos regresa a Trujillo donde recibe la oportunidad de laborar como docente junto a sus colegas Rafael María Urrecheaga, Máximo Briceño, Fabricio Vásquez, fray Alonso de Briceño (Obispo de Caracas), quien vivió y murió en Trujillo y de fray Ignacio Álvarez, redactor del acta de separación de la provincia de Trujillo de España.
El bachiller Rafael María fue pionero en impartir Técnica Moderna Pedagógica igual a los que se dictaban en las modernas escuelas alemanas de ese entonces.
Ejerció la profesión docente durante más de 30 años en el estado, siendo su mayor obra, la creación de las Escuelas «Bolívar» y Cristóbal Mendoza en 1912, situada en la casa que hace esquina con el viejo edificio de Gobierno de Trujillo, luego fue el edificio de Telégrafo, hoy Cantv; estas escuelas estuvieron y permanecieron ahí durante el gobierno estatal del General Víctor Manuel Baptista y nacional del Gral. Juan Vicente Gómez (1908 – 1935).
Según el historiador P. de Santiago, Altuve era un hombre alto y delgado, de carácter fuerte, nervioso, de ojos brillantes y mirada firme; apasionado en su trabajo, familiar y amigo de sus amigos; además de ser un señor audaz y valiente, pues apoyó a su amigo y colega Carrillo Guerra (Presidente de estado) durante la quema de la Catedral de Trujillo defendiendo con fusil en mano, el honor a su querido lar.
Se casó con la dama trujillana, doña Fernanda Carrillo Heredia con quien procreó dos hijos: Leonardo Altuve (abogado) y Ana Altuve, noble blasón del magisterio trujillano, murió el 20 de septiembre de 1920, a los 50 años cuando aún tenía mucho que dar por su tierra.
Colaboradores: Dr. Jesús Villegas Miliani, Dra. Diana Rengifo, Don Luis González (+Cronista Emérito)