A pesar de las dificultades por las cuales atraviesa el país en materia económica, política y social, en el estado Mérida la Iglesia Católica celebra que los padres y representantes puedan hacer sacrificios para que sus hijos estudien en instituciones católicas, dado a que estos planteles reciben el subsidio de las coordinaciones religiosas, entre ellas la Arquidiócesis de la entidad, y del pago de mensualidades.
El presbítero Leonardo Arcángel Ángulo, director del Departamento de Educación de la Arquidiócesis de Mérida, señaló que actualmente la matrícula en los colegios privados católicos ha ido en ascenso, por estar compuesta de un amplio abanico de oportunidades que ofrecen estas instituciones en el estado.
“El número de personas que quieren inscribir a sus muchachos en nuestras instituciones siguen en crecimiento, a pesar de todas las dificultades que estamos viviendo”.
Para Ángulo, la educación privada en Mérida es un norte para los padres que aspiran que sus hijos se formen en estos centros educativos, por la formación en valores y el fortalecimiento de la fe.
De igual forma, se refirió al nuevo diseño curricular, destacando que de aplicarse de forma correcta es una gran oportunidad para que los jóvenes descubran sus talentos y para qué son buenos, sus virtudes y, además, aclaren sus pensamientos en las áreas que pueden ser útiles.
“Es necesario que la nueva malla curricular madure bien para que la educación de un giro significativo, porque nuestros muchachos saldrán claros de lo que van a hacer y hacia dónde van, lo que también incide al momento de elegir una carrera universitaria”, expresó el presbítero.
Mes de la familia
En referencia al mes de la familia, el padre Ángulo señaló que la familia es el núcleo que forma parte de la vida esencial de un país, por ser la escuela desde donde se siembran los valores y la educación de todas las personas.
“Este es un mes para valorar y exaltar a la familia, porque es solo allí donde podemos construir una verdadera patria”.
La campaña para este año es “El evangelio de la familia”, por suponerse que la unión familiar es una buena noticia tanto para el aspecto religioso como por representar una fuente de alegría para todos”, apuntó.