Eran amigos los hallados sin vida en Peraza

La familia de Ávila comentó que sus pertenencias desaparecieron, no tenía ni sus documentos de identidad cuando lo hallaron.

Fueron identificados por sus familiares en la morgue de Valera como Alejandro José Ávila González, de 21 años, y Johnny José Calderón Valera, de 19 años. La evaluación forense que realizó el Senamecf confirmó sus identidades.

La familia de Calderón Valera acudió en horas de la mañana de ayer, más tarde llegaron los dolientes de Ávila González, ambos quedaron desconcertados tras confirmar que se trataba de ellos, no concebían motivos por los que pudieran llevarlos hasta aquel lugar y matarlos.

“Tenían tiempo que no se veían” dijo la pareja de Alejandro Ávila, quien recordó que la tarde del miércoles ambos salieron de su residencia, ubicada en Santa Lucía, hacia el casco central de Monay, donde su esposo acordó cobrar uno de los bultos de panela vendidos, así obtenía ingresos extra, pues trabajaba como mecánico junto a su padre.

Al caer la noche y percatarse de su ausencia la mujer se preocupó, lo esperó, se desveló. Al amanecer, salió de la casa y al hallar cobertura lo llamó a su teléfono celular pero no contestó, regresó angustiada, pasó otra noche sin saber de él.

Quería acabar con la incertidumbre, temía lo peor, en cuanto supo del hallazgo de dos cadáveres en el municipio, decidió acudir a la morgue de Valera y la respuesta despejó la incógnita de su paradero, pero dejó muchas otras interrogantes.

Fue abordada por las autoridades pero era ella quien esperaba respuestas. Una comisión del Cicpc analizaría las declaraciones de ambas familias y tras las pesquisas intentarían esclarecer el doble homicidio.


Enigma

Según se verificó en el Sistema Integrado de Información Policial (Siipol) las víctimas no tenían antecedentes penales, sus familiares aseguraron que tampoco tenían deudas o inconvenientes por los que pudieran vengarse de ellos, el móvil del crimen es otro enigma.


 

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