Para José Gregorio Torres, Secretario Político del Comité Ejecutivo Municipal de AD en Boconó, Venezuela está descendiendo a un callejón sin salida y viviendo al son que nos toca el fascismo, el comunismo y el nacionalismo porque se creen que son santos y nadie los va a cambiar. El país está viviendo una situación sumamente delicada porque la democracia que rescatamos desde 1958 hasta el presente, viene siendo maltratada por un régimen que cercena los derechos de todos.
En este caso – Agregó – no es secreto que hemos visto mermando el: Crecimiento, desarrollo y progreso, porque no han sido distribuidos equitativamente los recursos a cada uno de los 335 municipios del país. La situación cada día es más embarazosa porque vemos los servicios públicos inservibles. Las calles, carreteras troncales y vías de penetración deterioradas; corren libremente las aguas blancas y negras; la energía eléctrica viviendo uno de sus peores momentos, pésimas comunicaciones y no podemos dejar de mencionar que todas las empresas del Estado han convertido su parque automotor en chatarra. La infraestructura pública especialmente escuelas y liceos en muy mal estado. Mientras lo anterior es una realidad para todos los venezolanos, ahora nos vienen con el cuento del carnet de la patria, que al igual que el actual salario del venezolano, apenas alcanza para un desayuno.
AD un proyecto de vida
Tal y como están las cosas este es un país que por el salario que devengan sus trabajadores, la jornada laboral no debe exceder de una hora y no de 7 como está estipulado, porque el salario no alcanza ni para pagar el transporte.
Esta es una situación que enfrenta AD con un proyecto de vida como nacimos todos los accióndemocratistas. Ahí están los: Ingenieros, abogados, médicos, profesionales de la educación, amas de casa y los estudiantes el potencial más importante de nuestro país, porque fue y es el proyecto que venimos favoreciendo desde 1941 hasta el presente también con las obras más grandes y hermosas del país, las cuales y sin mezquindad lo digo, fueron construidas por los gobiernos de la IV República que presidieron AD y Copei.
Callejón sin salida
Los venezolanos tenemos la facultad cívica y constitucional, para protestar a través de elecciones libres, porque no nos están dando respuesta a las necesidades que padecemos y descendemos a un callejón sin salida, buscando un escape a esta situación y esto no se puede dar sino a través de un proceso electoral general para escoger al Presidente de la República, diputados, legisladores, gobernadores, nuevos concejales y alcaldes.
Nosotros proponemos que cada organización política debe presentar su proyecto y a raíz de esa iniciativa política es el pueblo el que decide y toma las decisiones por un cambio urgente antes que sea demasiado tarde.