Al menos 48 horas tenía el cadáver de un muchacho de 20 años en riberas del río Mocoy sector La Plazuela de Trujillo sin que nadie lo sospechara; al parecer la presencia de animales rondando el lugar y curiosos de la zona se acercaron y hallaron el cuerpo por lo cual notificaron a la policía.
A las 7 de la mañana de ayer reportaron el hallazgo del cuerpo en La Plazuela, se acercó una comisión policial mientras las pesquisas del Eje de Homicidios estuvieron a cargo del levantamiento y colecta de posibles pistas del crimen.
Mientras todo esto ocurría, los allegados a Daniel Armando Linares González (20) residenciados en San Jacinto parte alta, carretera vieja Trujillo-Boconó se enteraron del cuerpo que dejaron abandonado y ante la desaparición del muchacho, querían saber si se trataba del mismo.
“Cuando nos enteramos, bajamos a La Plazuela pero nos dijeron que ya habían levantado el cuerpo y lo llevaban a la morgue de Valera, por eso no pudimos reconocerlo en el sitio” indicaron a la prensa tías y primos de Daniel Armando.
El grupo de familiares todavía mantenían la duda sobre la identidad de la víctima, pero las autoridades policiales tenían una hipótesis de asesinato y el nombre del fallecido era el ya descrito. Al final de la tarde de ayer no hubo más dudas, se trataba del muchacho desparecido el pasado jueves y alguien le había causado la muerte por motivos desconocidos.
El muchacho salió de su casa junto a su esposa a las seis de la mañana, el pasado jueves dos de noviembre llegaron al sector San Jacinto y allí se despidieron, ella iba a trabajar y él tomó rumbo desconocido. “Dijo que iba a hacer unas diligencias” expresaron los familiares.
Se presume que al muchacho lo asesinaron ese mismo día, puesto que fue localizado en estado de descomposición y al parecer lesionado con arma blanca u objeto contundente.
Por lo tanto se abrió una investigación para dar con los sospechosos del crimen, por lo pronto los allegados comentaron que no había recibido amenazas y al parecer no tenía problemas con nadie.
Personal
Daniel Armando Linares González tenía 20 años, parientes indicaron que no trabajaba ni estudiaba; dejó a su pareja y un hijo. El hoy occiso tuvo un antecedente delictivo por droga en el año 2015 ante la Sub Delegación Trujillo.