Barcelona, 23 may (EFE).- El Barcelona cerró este domingo con una triste derrota (0-2) ante el Villarreal el ‘Año I después de Leo Messi’, una temporada en blanco marcada por la destitución del héroe de Wembley Ronald Koeman y el regreso de otra leyenda, Xavi Hernández, que bajo su dirección el primer equipo azulgrana consiguió el billete para la próxima Liga de Campeones.
Sin el astro argentino en el equipo, el conjunto catalán no ha podido revalidar la Copa del Rey, acabó segundo en la Liga -el curso pasado fue tercero- y quedó apeado de los octavos de final de la Liga de Campeones tras 16 clasificaciones consecutivas.
«Un aprobado justo», valoró recientemente Joan Laporta. Otra temporada, y ya van tres, sin ganar una liga que se escapó en el primer tercio de la temporada.
Condicionado por la delicada situación económica del club y las lesiones, Koeman empezó el curso justo de recursos. A las lesiones de jugadores llamados a ser importantes como Ansu Fati, Pedro González ‘Pedri’ y Ousmane Dembélé se sumó la salida de Antoine Griezmann al Atlético de Madrid en el último día de mercado.
En su lugar, el Barça fichó a Luuk de Jong, una petición del técnico neerlandés.
En este escenario, el Barça sumó 15 puntos de 30 posibles, lo que le situó a la misma distancia del líder de la competición -el Real Madrid- que del descenso.
La paciencia del presidente Joan Laporta acabó en la décima jornada tras una derrota en Vallecas (1-0). El relevo interino del holandés fue el técnico del filial, Sergi Barjuan, que logró una importante victoria contra el Dynamo de Kiev en la Liga de Campeones (0-1), si bien solo pudo sumar dos empates en la Liga.
El elegido para reflotar la nave fue otra leyenda del club. Tras largas negociaciones para resolver su contrato con el Al Sadd de Catar, Xavi aterrizó en Barcelona con el objetivo principal de acabar la Liga entre los cuatro primeros.
El egarense debutó con una victoria el 6 de noviembre ante el Espanyol (1-0), pero no selló la clasificación para los octavos de final de la ‘Champions’ tras empatar contra el Benfica (0-0) y perder claramente contra el Bayern de Múnich (3-0).
La trayectoria del equipo fue ascendente en la Liga, pese a la eliminación en octavos de la Copa del Rey a manos del Athletic Club y caer en la final de la Supercopa de España contra el Real Madrid. Con los fichajes de Pierre-Emerick Aubameyang, Ferran Torres, Adama Traoré y Dani Alves en el mercado de invierno, el Barça empezó a levantar el vuelo.
Tras la derrota el 4 de diciembre ante el Betis (0-1), el Barça encadenó en la Liga 15 partidos sin perder, un periodo en el que sobresalieron victorias de prestigio contra el Atlético de Madrid (4-2), el Real Madrid (0-4) y el Sevilla (1-0).
Pero cuando parecía que podría luchar hasta al final por LaLiga, el equipo se desinfló. A partir de la inesperada eliminación en los cuartos de final de la Liga Europa contra el Eintracht Fráncfort, el Barça sufrió dos derrotas en el Camp Nou ante el Rayo Vallecano (1-0) y el Cádiz (1-0) y sirvió en bandeja el título liguero al Real Madrid. En el último tramo de la temporada, los de Xavi bajaron los brazos y acabaron el curso como lo empezaron.
A la dirección deportiva se le acumulan las carpetas en un contexto económico complejo. Xavi quiere doblar todas las posiciones con futbolistas que compitan para ser titulares. El zaguero danés Andreas Christensen y el centrocampista marfileño Franck Kessié, ambos agentes libres, serán los primeros fichajes. El jugador del Bayern de Múnich Robert Lewandowski es el gran objetivo para reforzar la delantera.
Antes de entrar alguien tiene que salir. El técnico catalán ya ha comunicado a Riqui Puig, Óscar Mingueza, Samuel Umtiti y Martin Braithwaite que no cuenta con ellos. La lista de posibles bajas será más larga. Frenkie de Jong, un fijo para Xavi, es una de las opciones que el club baraja para conseguir ingresos extraordinarios y liberar masa salarial.
Pero para mejorar la plantilla todo dependerá de la capacidad de activar las denominadas «palancas» para sanear las maltrechas arcas de la entidad. La junta directiva tiene encima de la mesa las operaciones de vender parte de los derechos de televisión, Barça Studios -la productora audiovisual del club- y Barça Licensing and Merchandising (BLM), la empresa que comercializa los productos oficiales del club.
En el ‘Año II después de Messi’, ni Xavi ni el presidente Joan Laporta ni la afición aceptarían una segunda temporada en blanco. «Hay que reforzarse para optar a todos los títulos y poder competir», avisó el preparador en su última comparecencia.
Víctor Martí