Vuelve a cerrar vertedero de San Josecito mientras San Cristóbal colapsa de basura

Hace dos semana el vertedero de San Josecito volvió a estar operativo después de un cierre de más de 15 días

Las calles de San Cristóbal parecen pequeños vertederos de basura. Mariana Duque

El vertedero de San Josecito ha cerrado unas diez veces
desde el mes de enero de 2018. El colapso de los patios de las
terrazas del lugar vuelve a ser el punto de quiebre, mientras la
capital tachirense está abarrotada de basura


No hay un espacio sin basura, moscas y zamuros. La
ciudad de San Cristóbal se convirtió en un vertedero gigante, y no hay
plan especial, anuncio de recolección, ni súplica que valga, entre la
escasa prestación del servicio y la falta de conciencia ciudadana la
capital tachirense enfrenta una de sus peores crisis en materia
ambiental.

Durante el 2018 han ocurrido aproximadamente 10 cierres del vertedero
de San Josecito, espacio abierto sin tratamiento adecuado de los
desechos, en el que arrojan sus desperdicios las alcaldías
pertenecientes a la Mancomunidad Metropolitana de Desechos Sólidos
–Mamdesta-: San Cristóbal, Cárdenas, Torbes, Andrés Bello, Guásimos,
Junín, Córdoba, Capacho Nuevo y Capacho Viejo.

Dichos cierres que en la mayoría de los casos han sido por el daño de
la máquina limpiadora de los patios, dependiente de la gobernación del
estado, y en otras oportunidades porque la comunidad de San Josecito
decide trancar exigiendo servicio eléctrico, de agua o de gas, ha
dejado acumulación de desechos por más de 15 días de manera reiterada,
siendo San Cristóbal la más afectada, por tener mayor número de
habitantes.

Este miércoles otro cierre vuelve a quitar las esperanzas de ver la
ciudad limpia, pues la máquina limpiadora se volvió a dañar, las
terrazas colapsaron de desechos, y a las afueras hay 50 camiones
cargados con unas 800 toneladas de basura esperando, lo que llevó una
vez más a la suspensión del servicio de recolección, según una fuente
de la alcaldía de San Cristóbal que prefirió omitir su nombre.

A esto se le suma que mensualmente las empresas recolectoras aumentan
el costo del servicio, y sus camiones van quedando inoperativos por
falta de cauchos, baterías, aceites y de repuestos que ya no se
encuentran en el país.

Las autoridades nacionales, regionales y municipales en reiteradas
oportunidades se han culpado unas a otras, y aunque han buscando
realizar durante las últimas semanas un trabajo en conjunto no han
logrado limpiar las calles de la ciudad.

“Apoyo de la empresa privada”

Antes de que se conociera del cierre ocurrido en horas del mediodía de
este miércoles, el alcalde de San Cristóbal, Gustavo Delgado, hizo un
llamado a la empresa privada para que quienes puedan les alquilen
camiones y maquinaria a través de la cual la alcaldía pueda hacer una
recolección más rápida de la basura, pues destacó que cuentan tan sólo
con 13 compactadores, cuando necesitan 27.

Afirmó que la capacidad operativa es insuficiente para resolver esta
situación, pues iniciaron el año con cuatro empresas recolectoras y
tan solo quedan dos. “Pedimos a quienes tengan camiones volteos,
compactadores que se acerquen a la alcaldía de San Cristóbal y podamos
realizar alianzas estratégicas, contratos, porque necesitamos ese
apoyo”, expresó.

Recordó que a pesar de que ha solicitado camiones compactadores al
Ministerio de Ecosocialismo y Agua, así como un apoyo financiero y la
habilitación de un nuevo vertedero, no ha sido posible, aunque el
gobierno nacional ha entregado 350 compactadores a alcaldías con
gobernantes del Partido Socialista Unido de Venezuela –Psuv-.

Hizo un llamado a las comunidades, porque aunque algunos vecinos se
reúnen a limpiar, otros salen a arrojar basura a las calles una vez
han cumplido con el servicio. Manifestó que comenzarán a sancionar con
el pago de 2000 unidades tributarias a quienes vean dejando basura en
lugares no permitidos y con la suspensión del permiso de patente y
comercio a los dueños de negocios que saquen basura de manera
indiscriminada.

Hace dos semana el vertedero de San Josecito volvió a estar operativo
después de un cierre de más de 15 días. En ese momento los dimes y
diretes entre el enlace del gobierno nacional, Freddy Bernal, y la
gobernadora del Táchira, Laidy Gómez, eran la noticia. La solución fue
por pocos días.

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