Hace algunas semanas lo escribimos: se aproxima a Venezuela el lento, pero inexorable poder represivo de la justicia penal internacional.
Hace exactamente una semana, el 30 de marzo, el Fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) introdujo en la Sala de Cuestiones Preliminares de esa Corte, un escrito de 22 páginas en el cual expresa que mediante “un elaborado plan de escalada sistemática” contra la población civil, se llevaron a cabo acciones que constituyen crímenes de lesa humanidad en Venezuela. Otra aseveración importante que hizo el Fiscal Karim Khan es que todas estas acciones criminales fueron alentadas o aprobadas por el gobierno y llevadas a cabo principalmente por miembros de fuerzas de seguridad del Estado.
Para tener una idea general y superficial de la composición de la CPI debemos detallar que está conformada por tres Secciones: la de Cuestiones Preliminares, la de Primera Instancia y la de Apelaciones, además de la Presidencia, la Fiscalìa y la Secretaría. La causa que se sigue por los crímenes cometidos en Venezuela ya superó una primera etapa previa del proceso y es que el Fiscal Khan ya está convencido de que se cometieron tales crímenes y que los obstáculos que el oficialismo venezolano ha querido interponer a la realización del proceso, fueron rechazados ya de manera definitiva y concluyente por la Sala de Cuestiones Preliminares.
Que el Fiscal esté convencido de la perpetración de tales crímenes, en los cuales resaltan según el propio Khan detenciones ilegales, torturas y violaciones entre otros iniquidades, no es suficiente pues su función principal luego de realizar la investigación que efectúo, es convencer a los seis Magistrados de la Sala de Cuestiones Preliminares de que efectivamente se cometieron tales hechos, a fin de que se ordene realizar el juicio oral y público ante la Sala de Primera Instancia y que eventualmente pueda ordenar la detención de los implicados como sucedió con Vladimir Putin. La Sala de Primera Instancia compuesta por otros seis Magistrados es la encargada de dictar sentencia de culpabilidad o de no culpabilidad, sentencia que podrá ser recurrida ante la Sala de Apelaciones compuesta por cinco Magistrados.
Si, ya lo hemos escrito: los procesos judiciales son lentos y más los de carácter internacional, pero una cosa es presenciar el estancamiento de una causa por largos años, como sucedió con la actuación de la anterior Fiscal africana que no realizó diligencias efectivas para que la causa en cuestión avanzara y de quien se probó una cercana relación con la hermana de quien fuera Ministro de Minas y Presidente de Pdvsa hasta hace dos semanas, y otra cosa es constatar que el asunto “se mueve” positivamente hacia la realización del juicio y la consecución de la justicia a través de una sentencia largamente esperada.
La última actuación del 30 de marzo del Fiscal Khan, abre una honrosa expectativa para la justicia internacional la cual es esperada por los venezolanos de buena voluntad como respuesta al sufrimiento de miles de venezolanos que han caído en manos de los criminales funcionarios del régimen que asola a nuestro país.
A nivel interno el régimen está usando “su justicia” para saldar cuentas internas de la nomenclatura que ha dispuesto de los recursos del pueblo venezolano a su antojo. Con ello quiere dar imagen de pulcritud judicial pero el hambre y la pobreza extrema en que ha hundido a la mayoría de la sociedad, grita con fuerza en las calles y en los escenarios internacionales, como bien relata el defensor de Derechos Humanos Feliciano Reyna .quien cumplió gira destacada por varios países del mundo para exponer el profundo drama humanitario que padecemos.
No tendrán este régimen ilegítimo un Poncio Pilatos que a nivel internacional se lave las manos ante los crímenes de lesa humanidad que han cometido durante más de dos décadas. Lenta, gradualmente la acción de la justicia penal aprieta la cuerda desde el tribunal de La Haya.
Ya existe crujir de dientes, ya vemos como el Leviatán asoma su cabeza desde las profundidades del océano de dolor y amargura en que la tiranía ha transformado esta tierra que una vez fue destino mágico para inmigrantes de todo el planeta y ahora es noche de pesadillas. Pero no hemos abandonado la esperanza y con fe en ese Dios que entregó su vida para la salvación espiritual del mundo, rescataremos la Democracia y en comunidad de alegría celebraremos nuestra resurrección republicana.
Jorge Rosell y Jorge Euclides Ramírez
6 abril, 2023