Gabriel Montenegro.
Vecinos y comerciantes de hortalizas de Monay, parroquia La Paz del Municipio Pampán, denunciaron que en varios operativos policiales suscitado en esa comarca, los funcionarios se han dado a la tarea de perseguir y acosar a los comerciantes honestos, especialmente a los verduleros y vendedores de frutas y hortalizas, quienes en vez de ser protegidos son obligados a cerrar sus negocios bajo la mentira y amenaza de que es una “orden del gobernador del estado”.
Consideran los afectados, que esta aseveración es una cosa por demás falsa y descabellada, puesto el primer mandatario regional (HRS) es un hombre hijo de campesinos muy trabajadores, que más bien protege a los productores de nuestras zonas rurales y él mismo es un profesional militar salido de un campo regional.
Acoso permanente y arbitrario
Varios verduleros legalmente establecidos en sus puestos, expresaron a DLA que varios funcionarios, tanto de la PNB como de la policía del estado se dan a la tarea de acosar a quienes venden verduras y hortalizas e irrespetan el permiso de priorización que se les concede desde el Alto Gobierno Nacional, por ser parte del “Sector Alimentación”, al igual que lo tienen los trabajadores de seguridad, farmacias, talleres mecánicos, librerías, supermercados y comercio de productos necesarios para la dieta básica
Sostuvieron los denunciantes, que no es la primer vez que esto ocurre en la zona de esta parroquia pampanense, al igual que en las cercanías de “Ciudad Bendita” en Valera, en los mercados de Trujillo, Pampanito y Makroval, donde los verduleros itinerantes son perseguidos en vez de ser protegidos por los policías, quienes en muchas oportunidades los matraquean para que les regalen frutas, cambures, panela y hasta dinero.
En vez de atacar al hampa se agrede a trabajadores
Una de las testigos de estos “seudo-operativos” policiales, relató que hace pocos días un comerciante que tiene una venta de verduras en la cuadra que va hacia el liceo de Monay hasta la zona continua al cementerio, cerca del módulo de Defensa Civil, fue obligado a cerrar y muchos de productos perecederos sin refrigeración como tomates, cebolla larga frutas en general se le pudrió al estar varios días cerrado, sufriendo pérdidas millonarias y dejando a las amas de casa sin tomates, aguacates, cebolla y las legumbres que se descomponen sin refrigeración. Lo mismo ocurre con otros negocios similares, lo cual los tiene verdaderamente indignados y con un pueblo que los defiende de estos desmanes
Esto traduce pérdidas a quienes salen de madrugada con mucho sacrificio hasta los mercados de Valera y Trujillo, con la finalidad de comprar hortalizas y llevarlos a los municipios pequeños.
Así mismo, un vendedor de hortaliza fue a lanzar la basura al contenedor de la esquina sin el tapabocas puesto y se asustó cuando vio a la policía, porque la semana pasada habían puesto presa allí cerca a una persona sin las mascarilla y el salvoconducto, a quien maltrataron mucho.
Piden al gobernador y al comandante Villegas que intervengan, para que esto no ocurra, porque ellos salen a buscar su sustento de manera legal, con muchos trasnochos, para que el pueblo coma y tenga en la mesa sus productos: “ agredir al pueblo y perseguir a quienes trabajamos no es ningún socialismo…¡ No señor!- gritó uno de los verduleros afectados.